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Decretan alerta verde en Valle por desborde de río Goascorán

  • 27 octubre 2019 /

Una onda tropical dejará lluvias en toda Honduras.

Valle, Honduras

La Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) de Honduras declaró este domingo alerta verde (preventiva) en el departamento de Valle, fronterizo con El Salvador, por el desbordamiento del río Goascorán.

El organismo de protección civil declaró la alerta, por 48 horas, debido a que las precipitaciones provocaron el desbordamiento del río Goascorán en el sector de Muruhuca del municipio de Alianza.

Según un informe meteorológico del Centro Nacional de Estudios Atmosféricos, Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), que depende de la Copeco, una onda tropical dejará lluvias en todo el país centroamericano.

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La alerta verde significa que las personas deben dar seguimiento al comportamiento de un fenómeno que pueda resultar en desastre, y las autoridades activar el comité de monitoreo y vigilancia.

El resto del país centroamericano queda sin alertas. Sin embargo, la institución hondureña le pidió a la población tomar las precauciones necesarias debido a la saturación en el suelo y observar las zonas con riesgo a deslizamiento y derrumbes.

Además, recomendó asegurar techos de viviendas y restringir la circulación y actividades al aire libre, especialmente cuando hay truenos, debido al peligro que representan.

El organismo de protección civil además solicitó a la población evitar el cruce de ríos, riachuelos y quebradas que hayan aumentado su caudal, ya que 'la corriente puede arrastrar una persona fácilmente aún si esta se conduce a bordo de un vehículo'.

Las fuertes lluvias han causado en Honduras la muerte de dos menores de 5 y 16 años, más de 700 personas afectadas, crecidas de ríos, deslizamientos y daños en carreteras y otras vías de acceso, según cifras oficiales y de organismos de protección.

El país centroamericano figura entre los primeros más vulnerables del mundo tras el paso devastador, en noviembre de 1998, del huracán Mitch, que en categoría cinco dejó una estela de muerte y destrucción en Centroamérica.

Los hondureños sufren además los efectos del cambio climático, con un verano que cuando es muy prolongado afecta los cultivos agrícolas y otros sectores productivos, y cuando llueve mucho también.