San Pedro Sula, Honduras.
Acorralados por el dengue se encuentran los municipios de Choloma y Villanueva, los cuales registran durante el año 3,335 y 1,335 casos de la enfermedad, respectivamente.
Pese a los esfuerzos que están haciendo las autoridades por prevenir la proliferación del virus, los índices de infestación no se reducen en estas ciudades, que entre las dos suman 11 muertes confirmadas por la enfermedad, seis de Villanueva y cinco de Choloma.
Equipo de LA PRENSA realizó ayer un recorrido por comunidades de ambos municipios para tener un panorama claro del porqué de la epidemia que está afectando a miles de pobladores.
La situación es fácil de entender: la falta de higiene dentro de los hogares, acumulamientos de agua lluvia en recipientes y solares con maleza están provocando que la fumigación y abatización no estén teniendo los resultados esperados, aunque los habitantes consultados afirmaron también que hay poca labor de fumigación.
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“Aquí no han venido a fumigar y en la noche, ya tipo 6:00 de la tarde, es zancudero el que anda, con plagatox tenemos que estar para que se vayan ese montón de animales”, comentó María Benítez, moradora del sector La Curva, Choloma.
En ese mismo punto de esa ciudad reside doña Margarita Guardado junto con sus dos hijas, mismas que hace pocas semanas estuvieron hospitalizadas a consecuencia del dengue.
| Las autoridades afirman que es peligroso que existan solares baldíos sin limpiar.
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Doña Margarita relató que una de sus pequeñas, de cinco años, estuvo a punto de perder la vida por el padecimiento, pues se le bajaron las plaquetas.
“Yo trato de tener limpio mi solar, lavo la pila cada tres o cuatro días y evito los recipientes con agua, pero a la par tengo un solar baldío que el dueño tiene tiempos sin limpiarlo”, denunció la ciudadana.
En Villanueva, las zonas con mayor incidencia de la enfermedad son las colonias Lomas, José Cecilio del Valle y Martín Fajardo. En estas comunidades, las autoridades de Salud con apoyo de organizaciones han emprendido una labor educativa a fin de impactar en la conciencia de las familias.
Sherlyn Deras, oficial de salud del proyecto Nuestra Salud que coordina la Liga de Lactancia Materna, manifestó que al día están visitando unas 50 viviendas, donde llevan información de valor que motiva a los vecinos a combatir el virus.
“Nuestra tarea se centra en los cambios de comportamiento, estamos trabajando con charlas de casa en casa. Cuatro colegios del municipio nos están apoyando con estudiantes que fungen como voluntarios durante las jornadas”, explicó Deras.
