La Ceiba, Honduras.
Las filas y demoras para cancelar la tasa portuaria molesta a muchos pasajeros que a diario viajan de La Ceiba a Islas de la Bahía y de otras partes del país para hacer turismo en el Caribe.
El cobro de 24 lempiras a todo pasajero que viaje por la vía marítima hacia Utila y Roatán fue aprobado en la administración municipal pasada, pero en ese entonces se acordó con las empresas marítimas cobrar 6 lempiras. Este año, la actual Corporación Municipal puso en vigor esta tasa y construyó una caseta en el puerto de cabotaje a inicios de marzo.
Las filas que se forman en esta oficina municipal demora las salidas de los ferrys, lo que genera molestias a muchos pasajeros.
“Uno llega a comprar el boleto del yate, y luego hay que salir a otro lado para pagar esa tasa. Es incómodo porque a veces hay que hacer fila bajo el sol”, dijo una pasajera, quien prefirió omitir su nombre y viaja seguido a Utila.
“Como pasajero he solicitado un recibo con RTN, ya que solo un boleto dan como comprobante. Es primera vez que viajo por la vía marítima, siempre me movilizo por avión, pero esto incomoda”, opinó Kennet Almendárez mientras hacía su reclamo en la oficina municipal antes de partir a Roatán.
La oficina recaudadora es pequeña y su corredor externo resulta insuficiente ante las extensas filas que se forman cuando hay afluencia.
“Esperamos que esto se pueda hacer de otra manera, hay malestar de los pasajeros y ellos no dicen la Portuaria sino el Galaxy”, dijo Rodolfo Solomon, gerente del Galaxy Wave en La Ceiba.
“Antes se cobraban los 6 lempiras directamente en nuestra oficina, ahora ya no, abrieron oficina de la tasa portuaria”, lamentó, al remarcar que los ferrys no están saliendo a tiempo.
Los encargados del puerto de cabotaje aseguran que trabajan fuerte para minimizar los tiempos en los trámites del pago de la tasa de pasajeros. “Hay que recordar que esto no es un cobro nuevo, siempre se ha hecho, con la diferencia que antes lo cobraban las empresas de los ferrys”, explicó Héctor Caballero, gerente de esta terminal marítima municipal.
Han ofrecido alternativas a las empresas para que no hayan atrasos, como asignar personal portuario en las oficinas de ambas empresas, duplicar el personal asignado en la caseta municipal, “o que las empresas puedan establecer como norma que los pasajeros estén dos horas antes de zarpar”.
