21/04/2024
11:47 PM

Tegucigalpa está 'cercada' por densa capa de humo

Capitalinos están respirando gases tóxicos producidos por los incendios.

Tegucigalpa, Honduras.

Una densa capa de humo rodea desde hace unos diez días los cielos de la capital Tegucigalpa.

La enorme nube de humo que afecta al Distrito Central es producto de los incendios que se han registrado este año en Tegucigalpa y Comayagüela.

Hasta la noche del viernes el Instituto de Conservación Forestal había contabilizado 98 incendios en las montañas y cerros capitalinos, en su mayoría provocados por personas malintencionadas.

Lea: Con incendio en El Hatillo van 98 solo en Tegucigalpa

El resultado no solo es el deterioro en los bosques, sino la enorme capa de humo y aire contaminado que ya lleva, dicho sea de paso, unos diez días estacionada en la capital.

Este humo provoca enfermedades respiratorias y oftalmológicas en las personas, por lo que una medida de prevención recomendada por las autoridades es el uso constante de mascarillas para proteger las vías respiratorias.



Carlos Canales, meteorólogo del Centro de Estudios Oceanográficos y Sísmicos (Cenaos), explicó que son varios los factores que inciden para que el humo se mantenga en los cielos del Distrito Central.

Lea también: Incendios destruyeron más de tres mil hectáreas de bosques en Honduras en dos meses

En primer lugar, si siguen ocurriendo los incendios forestales en Tegucigalpa la capa de humo no solo se mantendrá, sino que se hará más densa.

Canales dijo que otro factor son los aspectos topográficos del Distrito Central, pues hacen que el humo se acumule sobre la ciudad, y agregó que 'el viento suave no permite que el humo se desplace horizontalmente hacia otro sitios y se mantiene -el humo- estacionario.

Dijo también que la inversión térmica débil y la velocidad de los vientos en Tegucigalpa influyen a que se mantenga la capa de humo.



La inversión térmica es cuando la temperatura disminuye con la altura, por lo que si la temperatura aumenta, el humo va a estar muy cerca de la superficie terrestre; esto hará que se acumule el humo, y si no hay vientos verticales tampoco desaparecerá.

Actualmente en los vientos en la capital son alrededor de 10 a 12 kilómetros por hora y se pronostica que se mantengan así por unos 5 días; esta velocidad no es suficiente para desplazar el humo hacia otros sitios fuera de la ciudad.

Las lluvias (por al menos dos días) podrían ayudar a que se disipe el humo, pero Cenaos no pronostica chubascos para estos días; al contrario, se espera que las temperaturas vayan en aumento.