19/04/2024
12:32 AM

Preparan a más de 1,000 familias para actuar ante tsunami en Omoa

La planificación e instrucción ante los desastres naturales son prioridad para Copeco.

    Omoa, Cortés.

    El fuerte sonido de las sirenas de emergencia dio por iniciado, a las 10:00 am, el simulacro de tsunami en las comunidades de Masca y Pueblo Nuevo.

    La evacuación de la zona arrancó rápidamente desde las calles colindantes con la playa en dirección a la parte alta del municipio, en las faldas de la sierra de Omoa, todo con la intención de que ninguno de los pobladores se quedara atrás.

    Personal del Cuerpo de Bomberos, elementos de Copeco, Cruz Roja y de los Comité de Emergencia Locales (Codeles) se desplazaron con los habitantes por la calle principal de ambas comunidades, un trayecto de al menos un kilómetro en subida atravesando la carretera CA-13.

    Los alumnos fueron sacados de las escuelas por sus maestros, uno tras otro, tomados de los hombros, una práctica que se realiza para que ninguno de los infantes salga en dirección equivocada ni entre en pánico ante la situación inesperada.

    LEA: Omar Pinto, un trujillano que hace de la basura un arte

    Mientras los pobladores iban caminando hacia el punto de reunión, la actividad se supervisaba desde el centro de monitoreo y logística. Cerca de las 10:35 am, el simulacro finalizó en los dos puntos de acopio, la hacienda Masca y el barrio California, ambos ubicados en una parte alta de una colina.

    Agustina Suazo Vargas, vicepresidenta del patronato de Masca, reconoció que aunque se preparó a la población durante meses para la actividad, no todos se involucraron porque estaban laborando en el momento del simulacro.

    “A través de los conocimientos que Copeco está brindando a los Codeles podremos estar preparados para un desastre natural de esta magnitud”.

    Alex Estévez, comisionado de Copeco, dijo que esta es la mejor manera de evaluar la capacidad de respuesta de la comunidad y que “faltó un poco de involucramiento de los pobladores”.

    “Es la primera vez que se hace un simulacro en esta zona, seguiremos trabajando para que ellos sepan cómo proceder ante un tsunami. El objetivo es ver las debilidades que tenemos como sistema y fortalecer, hacer que la gente entienda que están en zona de riesgo y se vincule”.

    En esas dos comunidades viven cerca de 1,000 familias, la mayoría de escasos recursos económicos.

    El simulacro también se realizó en Tornabé, Tela.