Idis Nicol Tábora, una joven hondureña de 15 años, decidió arriesgar su vida y migrar ilegalmente hacia Estados Unidos con el único deseo de reencontrarse con su padre a quien no veía desde hace 10 años; sin embargo no pudo lograr su tan anhelado sueño ya que en la frontera fue detenida por las autoridades.
La joven fue enviada a un refugio infantil en Brownsville, Texas, y se sumó a los más de 11,000 niños migrantes que permanecen bajo custodia del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EEUU.
La adolescente dijo a CNN que los asesores del centro le aconsejaban durante los momentos en que sufría de ansiedad y ella trataba de distraerse con juegos.
Fotos CNN
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El anhelado reencuentro ocurrió en el Aeropuerto Internacional de Miami en donde padre e hija se unieron en un fuerte abrazo, luego de un largo tiempo separados.
“Mi hija es mi corazón”, dijo a CNN el orgulloso padre mientras su hija se secaba las lágrimas.
Idis, quien llevaba sus pertenencias en una bolsa negra, estaba muy nerviosa, pero feliz de estar al lado de su padre.
Ambos salieron del aeropuerto muy felices, sin mirar atrás.