Tegucigalpa, Honduras.
Velásquez aseguró que no tolerarán ninguna práctica reñida con la ley, aunque reconoció que el tráfico de licencias ha sido una actividad “enraizada” en la institución y por eso tienen toda la intención de resolver el problema de una forma definitiva, y eso solo se logrará recolectando los medios de prueba.
Alrededor de 10 policías relacionados con el tráfico de licencias de conducir están bajo investigación y se le da seguimiento a otras pesquisas, confirmó ayer a LA PRENSA el titular de la Dirección Nacional de Vialidad y Transporte (CNVT), Gerson Velásquez. Velásquez, quien reconoció que esa mala práctica continúa en varias ciudades, informó que los expedientes están en poder de la Dirección de Asuntos Disciplinarios de la Policía (Didadpol), institución que decidirá al final si los eleva a otra instancia.
El alto oficial explicó que esos actos son considerados por el código disciplinario de la institución como una falta grave.
“Hemos remitido varios expedientes a la Dirección de Asuntos Disciplinarios que son los que deducirán si esos policías tienen alguna responsabilidad en los casos que se les ha señalado”, señaló el comisionado de la Policía.
Contrainteligencia. Dentro de los controles para evitar irregularidades, la Dirección de Vialidad cuenta con la unidad de contrainteligencia que son los que han detectado las anomalías.
| La Dirección de Vialidad y Transporte y otras instituciones trabajan en un proyecto de nuevas reformas a la Ley de Tránsito.
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Según Velásquez, el tráfico de licencias no consiste, precisamente, en extraer documentos de la institución, porque no es fácil hacerlo, ya que el documento cuenta con varios protocolos de seguridad que son difíciles de evadir.
“Lo que sí pueden hacer es facilitar u obviar la prueba de conducción y los exámenes teóricos que son requisitos indispensables para la obtención del documento”, dijo el funcionario policial.
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Velásquez agregó que mientras haya seres humanos, siempre existirá la posibilidad de que algunos se presten para irregularidades, no obstante, agregó que el proceso de depuración de la Policía incluye la práctica de mecanismos de detección de ese tipo de anomalías.
El oficial indicó que producto de esos mecanismos de control detectaron casos puntuales, especialmente en ciudades periféricas como Tela, Atlántida; El Progreso, Yoro; Puerto Cortés, Cortés; Nacaome, Valle; y Ocotepeque, Ocotepeque, donde algunos miembros policiales no siguieron el debido proceso en el otorgamiento de licencias.
Capacidad instalada. Reconoció que en algunas ciudades, la Dirección de Vialidad no cuenta con la suficiente capacidad instalada para el proceso de emisión de licencias y eso de alguna manera facilita a que algunos malos policías aprovechen la situación. Velásquez comentó que si bien es cierto que la Policía está obligada a trabajar dentro de la ley, también hay ciudadanos que deben mejorar su conducta, porque en muchos casos hacen propuestas de soborno a malos policías, que en lugar de reprenderlos aceptan cometer el delito.
El pasado lunes, LA PRENSA reveló que continúa la venta irregular de estos documentos.
| Ciudadanos incentivan la operación de las mafias
TEGUCIGALPA. El asesor jurídico de la Comisión de Transformación de la Policía Nacional, German Leitzelar, dijo que de alguna manera las mafias que trafican licencias han encontrado el respaldo de un sector de los ciudadanos que tampoco les importa actuar bajo el manto de la inmoralidad.Explicó que la Comisión Transformadora está revisando los reglamentos de la Dirección de Asuntos Disciplinarios de la Policía (Didadpol) y apoyándolos para la aprobación de la Ley de Agencias Privadas de Seguridad.
La coordinadora del Observatorio de la Violencia, Migdonia Ayestas, expresó que la mala práctica de obviar la ley, linda con los valores y la idea de muchas personas que creen que la ley no los perseguirá. |
