San Pedro Sula, Honduras.
El Centro de Atención y Rehabilitación Integral Sensorio Motora y del Aprendizaje (Carisma) inauguró ayer sus nuevas instalaciones en la ciudad.
La organización cambió su ubicación a la colonia Tara, luego de funcionar por cinco años en un local más pequeño en el mismo sector, pero debido a la creciente demanda se vieron en la obligación de contar con un espacio más amplio.
Claudia Tobar, directora de Carisma, explicó que el centro ofrece ayuda psicopedagógico en las áreas cognitiva conductual, estimulación temprana, terapia ocupacional, psicomotricidad, arte, expresión corporal y un programa de apoyo para la inclusión escolar.
“Contamos con espacios adecuados para la necesidad de cada alumno, atendido por personal capacitado para dar atención personalizada”, dijo Tobar.
Manifestó que trabajan con niños de seis meses hasta adolescentes entre los 13 y 15 años. Actualmente atienden a unos 24 niños con diferentes problemas, como autismo, ceguera, parálisis infantil, entre otros.
Explicó que a diferencia de otros centros que también se enfocan en estos padecimientos, Carisma, con su equipo, prepara a los maestros de las escuelas adonde asisten los infantes que reciben. “El centro ha sido de gran ayuda para Hillary, mi hija, Es una niña con autismo, pero desde hace dos años que la traigo a terapia ha podido socializar más”, comentó Nora Pineda, madre de familia.
El Centro de Atención y Rehabilitación Integral Sensorio Motora y del Aprendizaje (Carisma) inauguró ayer sus nuevas instalaciones en la ciudad.
La organización cambió su ubicación a la colonia Tara, luego de funcionar por cinco años en un local más pequeño en el mismo sector, pero debido a la creciente demanda se vieron en la obligación de contar con un espacio más amplio.
Claudia Tobar, directora de Carisma, explicó que el centro ofrece ayuda psicopedagógico en las áreas cognitiva conductual, estimulación temprana, terapia ocupacional, psicomotricidad, arte, expresión corporal y un programa de apoyo para la inclusión escolar.
“Contamos con espacios adecuados para la necesidad de cada alumno, atendido por personal capacitado para dar atención personalizada”, dijo Tobar.
Manifestó que trabajan con niños de seis meses hasta adolescentes entre los 13 y 15 años. Actualmente atienden a unos 24 niños con diferentes problemas, como autismo, ceguera, parálisis infantil, entre otros.
Explicó que a diferencia de otros centros que también se enfocan en estos padecimientos, Carisma, con su equipo, prepara a los maestros de las escuelas adonde asisten los infantes que reciben. “El centro ha sido de gran ayuda para Hillary, mi hija, Es una niña con autismo, pero desde hace dos años que la traigo a terapia ha podido socializar más”, comentó Nora Pineda, madre de familia.
