Tegucigalpa, Honduras
Limpia y sin obstáculos que impidan el paso de las personas se observó el Paseo Liquidámbar, luego de la intervención policial realizada en la zona.
Desde las 5:00 am de ayer, más de 300 agentes de la Policía Nacional y Policía Municipal se apostaron en la peatonal.
En el lugar, también hubo presencia de agentes de inteligencia e investigación.
De forma estratégica se colocaron los agentes de seguridad a lo largo de los 800 metros lineales que mide el Paseo Liquidámbar.
Está acción se realizó debido a la invasión de vendedores ambulantes que había en el lugar, y que lo habían convertido en un mercado persa.
“Estamos dando apoyo a la Policía Municipal para dar cumplimiento a la ordenanza en la que no se permite a los vendedores ambulantes en el centro histórico de la capital”, expresó César Gonzales Ramírez, subcomisionado de la Unidad Metropolitana Policial número uno. Otro de los objetivos de los elementos policiales es evitar enfrentamientos con los vendedores ambulantes que se instalan en la zona. “Con algunos vendedores se dialogó y se les explicó que no pueden estar en este lugar, por lo que ellos se retiraron”, dijo Gonzales.
Los elementos policiales se colocaron en los 10 accesos que tiene el paseo Liquidámbar, impidiendo el ingreso a los vendedores ambulantes.
Las instrucciones que tienen los agentes es permanecer en el lugar de forma indefinida.
Camino libre. Las miles de personas que van al centro de la capital realizaron sus actividades con normalidad y algunos resultaron sorprendidos por la presencia policial.
A eso de las 2:00 pm, un nutrido grupo de vendedores realizó una protesta por el centro de la capital exigiendo horarios para vender sus productos en el lugar.
“Nosotros fuimos a la Gerencia de Orden Público, donde nos atendieron, pero nos dijeron que este problema no les compete a ellos, nosotros queremos dialogar con las autoridades para solventar esta problemática”, manifestó Mario Velásquez, vendedor.
