Tegucigalpa, Honduras.
Con fecha del 12 de agosto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió la medida cautelar número 972-18 en la que consideró que tanto la directora de Medicina Forense, Julissa Villanueva, como tres de los técnicos de su unidad se encuentran en una situación grave y de urgencia, por lo que solicitan al Gobierno de Honduras que se adopten las medidas necesarias para salvaguardar sus vidas.
En el documento la CIDH determina que en el análisis realizado antes de otorgar las medidas se determinó que las amenazas contra la directora de Medicina Forense y sus técnicos provienen del caso del crimen de la jefa de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic), Sherill Yubissa Hernández.
El documento describe la serie de amenazas que entre el 12 y 18 de junio recibieron los funcionarios de Medicina Forense y que fueron confirmadas por la Dirección de Inteligencia Policial (Dipol), el 28 de junio, determinando que “las amenazas eran verdaderas y de gravedad”, cita el escrito.
La CIDH determina que la situación de Villanueva y sus tres técnicos es calificada como de “grave riesgo”, teniendo como nexo casual las labores que desarrollan los solicitantes de dichas medidas. Por lo tanto, la CIDH recomienda que el Gobierno adopte las medidas para protegerles.
Sherill Yubissa Hernández se desempeñaba como jefa de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) y fue encontrada sin vida el pasado 11 de junio en el interior del apartamento en donde residía en Santa Rosa de Copán, zona occidental de Honduras.
Con fecha del 12 de agosto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) emitió la medida cautelar número 972-18 en la que consideró que tanto la directora de Medicina Forense, Julissa Villanueva, como tres de los técnicos de su unidad se encuentran en una situación grave y de urgencia, por lo que solicitan al Gobierno de Honduras que se adopten las medidas necesarias para salvaguardar sus vidas.
En el documento la CIDH determina que en el análisis realizado antes de otorgar las medidas se determinó que las amenazas contra la directora de Medicina Forense y sus técnicos provienen del caso del crimen de la jefa de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic), Sherill Yubissa Hernández.
El documento describe la serie de amenazas que entre el 12 y 18 de junio recibieron los funcionarios de Medicina Forense y que fueron confirmadas por la Dirección de Inteligencia Policial (Dipol), el 28 de junio, determinando que “las amenazas eran verdaderas y de gravedad”, cita el escrito.
La CIDH determina que la situación de Villanueva y sus tres técnicos es calificada como de “grave riesgo”, teniendo como nexo casual las labores que desarrollan los solicitantes de dichas medidas. Por lo tanto, la CIDH recomienda que el Gobierno adopte las medidas para protegerles.
Sherill Yubissa Hernández se desempeñaba como jefa de la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) y fue encontrada sin vida el pasado 11 de junio en el interior del apartamento en donde residía en Santa Rosa de Copán, zona occidental de Honduras.
