Tegucigalpa, Honduras
No fue una tarea fácil la que enfrentaron las autoridades forenses, fiscales y cuerpos de investigación para llegar hasta la zona donde fallecieron el sábado seis personas en el accidente del helicóptero que se estrelló en la montaña Yerba Buena, en el municipio de Lepaterique, Francisco Morazán.
Los equipos que se desplazaron llegaron al lugar de la tragedia a las 8:00 pm del sábado. Fue una escena compleja, era una zona boscosa, de difícil acceso.
La neblina y la lluvia no permitían desplazarse con rapidez, por lo que a los equipos de forenses, investigadores y fiscales se les hizo difícil transitar por el lugar. Para llegar fueron apoyados por los Bomberos, quienes con lazos les hicieron más fácil movilizarse hasta el punto donde ocurrió el accidente.
Llegar a la zona les llevó casi dos horas de camino en carro y más de hora y media a pie. Lo inhóspito del lugar, lo selvático y la falta de visibilidad hizo que los equipos hicieran uso de luces, la iluminación artificial fue determinante ante las dificultades que enfrentaron en el lugar para hacer el levantamiento de las víctimas.
Esas condiciones adversas hicieron que los forenses decidieran parar los trabajos y los reiniciaran hasta ayer en horas de la mañana.
Fue a las 5:30 am de ayer que el trabajo de reconocimiento se retomó. Transcurrieron nueve horas para finalizar la recolección de los cuerpos, cuyo trabajo finalizó a las 2:00 pm. Un equipo completo multidisciplinario integrado por forenses, odontólogos, expertos en dactiloscopia, patólogos y fotógrafos llevaron a cabo las tareas de reconocimiento. El apoyo de las instituciones de socorro, policiales y militares fue vital para recuperar los cuerpos de la montaña.
Después de ese proceso, en tres canastas especiales subieron los restos de las tres víctimas: Hilda Hernández, hermana del presidente Juan Orlando Hernández; Iván Vásquez Portillo, quien pilotaba la nave; el copiloto Gerson Díaz Nolasco, y como pasajeros la capitana de infantería Patricia Valladares y los miembros de la Guardia de Honor Presidencial (GHP) Nahúm Lagos y Marco Antonio Banegas.
 Autoridades se tomaron nueve horas para las tareas de reconocimiento.
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El traslado
A las 2:00 pm se inició el camino de regreso a Tegucigalpa. En dos unidades del Centro de Ciencias Forenses trasladaron los restos de las víctimas. Eran escoltados por dos patrullas, una militar y una policial, y tras llegar a las instalaciones forenses a las 3:51 pm ingresaron por el parqueo interno para que los especialistas procedieran a practicar la autopsia.
Julissa Villanueva, directora de Medicina Forense, dijo que de seis a ocho horas llevaría el proceso de autopsia. “Los cuerpos están identificables, pero igual en una autopsia se necesita cotejar información con los familiares”, expresó. Los cuerpos los entregaron a los familiares en horas de la noche y hoy serán sepultados.
 En Medicina Forense, familiares de las seis víctimas llegaron para agilizar los trámites y esperaron que les entregaran los cuerpos a la medianoche.
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Evaluación técnica es clave para conocer qué originó falla
La zona donde se produjo el accidente aéreo sigue acordonada. Pese a que ya se efectuaron las tareas de levantamiento de los cuerpos, sigue una segunda fase relacionada con el estudio técnico que expertos en aviación harán para determinar qué provocó las fallas en el helicóptero AS350-B-3 Ecureuil, con matrícula FAH-905.
“En este caso se nombrará una junta de investigación de accidentes, quienes van a dictaminar sobre lo sucedido”, explicó Pablo Herrera, vocero de la Fuerza Aérea Hondureña (FAH).
Determinante será el dictamen técnico de los expertos para determinar si fueron fallas técnicas, un error humano, las condiciones meteorológicas u otros elementos los que provocaron el accidente donde perdieron la vida seis personas.
