24/04/2024
09:54 AM

Con sensores acústicos medirán niveles de ruido

Los niveles de ruido que se escuchan a diario en el centro de la ciudad superan los 100 decibeles. Esperan monitorear los sonidos en tiempo real y de manera permanente.

San Pedro Sula, Honduras.

Los gritos de los vendedores ambulantes, el ruido de los carros y los altoparlantes que a diario se escuchan en varias calles y avenidas de la ciudad perjudican el oído. En junio, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que la contaminación acústica es la segunda amenaza a la salud pública, después de la contaminación en el aire.

El plan de arbitrios en su artículo 199 establece que los comercios o establecimientos que sean susceptibles de producir contaminación sónica deberán respetar los niveles de sonido permisibles, que son de 85 decibeles dentro del establecimiento y 50 fuera del mismo; sin embargo, los dueños de locales no cumplen.

Cristy Raudales, gerente de la División Municipal Ambiental (Dima), indicó que los decibeles que se escuchan en las calles superan los permitidos.

La regulación es difícil, pues cuando llegan a hacer los operativos, la gente apaga las bocinas y no se pueden sancionar. “El mayor problema es que los vendedores no piden permiso para instalar bocinas, a eso se suma el ruido de los carros y otros sonidos que acumulados pueden llegar a los 100 decibeles”.

Sensores

Para tener un mejor control de los decibeles, las autoridades municipales instalarán sensores de sonido permanentes que monitorearán en tiempo real la cantidad de ruido que se produce en determinados puntos de la ciudad. “Los sensores nos van a servir para darnos alertas de donde se esta ocasionando el ruido. Ahora funcionamos vía denuncia o por operativo; pero con los sensores sabremos cuáles son los horarios de problemas”.

Raudales espera que los 10 sensores estén instalados al final del año en los lugares adonde más se producen sonidos, es decir, el comercio y la zona turística.

Francisco Zepeda, secretario general de Dima, explicó que al mes se dan unos 25 permisos para instalar bocinas. “Los permisos solo duran un día, por lo que los comerciantes vienen a pedir permiso por tres días”. El funcionario precisó que el 90% de los permisos que se dan son para comercios que están en el centro de la ciudad.

“Tratamos de regular que en una sola cuadra haya varias tiendas con bocinas, además luchamos con el sector informal, los vendedores ambulantes”.

Cuando se incrementa el comercio es cuando más operativos se realizan para no dañar a la población.