San Pedro Sula, Honduras.
Contra todos los pronósticos negativos suscitados a principios de año por la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, la economía de Honduras, en contraste con años pasados, se ha fortalecido y cerrará diciembre con un crecimiento inesperado: 4%.
Por primera vez, después de nueve años, Honduras alcanzará un porcentaje codiciado y, al mismo tiempo, despedirá 2017 con una mejor calificación soberana ( B1, con perspectiva estable, concedida por Moody´s) gracias a su desempeño económico y a otras variables que inciden en el riesgo de invertir en un país. En enero, las autoridades del Banco Central de Honduras (BCH) temían que el producto interno bruto (PIB) experimentara una contracción a causa de las deportaciones masivas de emigrantes hondureños que ejecutaría la administración de Trump.
Al cabo de ocho meses de la asunción del nuevo presidente norteamericano, los hondureños siguen en Estados Unidos trabajando y las remesas mantienen una trayectoria ascendente.
“Esta comunidad de más de un millón de hondureños que están en este país es el motor de la economía a través de las remesas. Por eso siempre le estamos pidiendo al Gobierno hondureño la suficiente atención”, dijo Francisco Portillo, presidente de la Comunidad Hondureña Integrada Francisco Morazán en Miami, Florida.
En una entrevista telefónica con LA PRENSA expresó que “no hay que preocuparse, no habrá deportaciones masivas, el Gobierno de Honduras ya solicitó una extensión del TPS”.
“Las deportaciones masivas serán difíciles. Habrá, como siempre, deportaciones reguladas; pero debemos esperar la decisión del presidente Trump sobre el TPS”, dijo.
En caso de que Trump extendiera solamente a seis meses el TPS ( Estatus de Protección Temporal), organizaciones, como la de Portillo, que realizan en estos días cabildeos con senadores, trabajarán en la legalización de estas personas que por décadas le han pagado impuestos a la administración estadounidense.
Contra todos los pronósticos negativos suscitados a principios de año por la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca, la economía de Honduras, en contraste con años pasados, se ha fortalecido y cerrará diciembre con un crecimiento inesperado: 4%.
Por primera vez, después de nueve años, Honduras alcanzará un porcentaje codiciado y, al mismo tiempo, despedirá 2017 con una mejor calificación soberana ( B1, con perspectiva estable, concedida por Moody´s) gracias a su desempeño económico y a otras variables que inciden en el riesgo de invertir en un país. En enero, las autoridades del Banco Central de Honduras (BCH) temían que el producto interno bruto (PIB) experimentara una contracción a causa de las deportaciones masivas de emigrantes hondureños que ejecutaría la administración de Trump.
| 1,800
Millones de dólares
Dejarán al final del año las exportaciones de café, que lideran el sector agroindustrial integrado por palma aceitera, melones y sandías, camarones y banano.
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“Esta comunidad de más de un millón de hondureños que están en este país es el motor de la economía a través de las remesas. Por eso siempre le estamos pidiendo al Gobierno hondureño la suficiente atención”, dijo Francisco Portillo, presidente de la Comunidad Hondureña Integrada Francisco Morazán en Miami, Florida.
En una entrevista telefónica con LA PRENSA expresó que “no hay que preocuparse, no habrá deportaciones masivas, el Gobierno de Honduras ya solicitó una extensión del TPS”.
“Las deportaciones masivas serán difíciles. Habrá, como siempre, deportaciones reguladas; pero debemos esperar la decisión del presidente Trump sobre el TPS”, dijo.
En caso de que Trump extendiera solamente a seis meses el TPS ( Estatus de Protección Temporal), organizaciones, como la de Portillo, que realizan en estos días cabildeos con senadores, trabajarán en la legalización de estas personas que por décadas le han pagado impuestos a la administración estadounidense.
| Reservas
El país posee $3,200 millones en reservas internacionales para cubrir cinco meses de importaciones.
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En la última revisión del Programa Monetaria 2017-2018, realizada con cifras registradas hasta junio, el BCH mejoró el pronóstico. Cifró el crecimiento del PIB entre 3.7% y 4.1%.
Este mes, el Fondo Monetario Internacional (FMI), después de que una misión de sus funcionarios concluyera una visita el pasado 14, proyectó un crecimiento de 4%, contra “3.5%, proyectado originalmente”.
Manuel Bautista, presidente del BCH, reconoce el aporte “valioso de los emigrantes para la economía de Honduras”
“Sigue manteniéndose el flujo y ritmo de las remesas en 13% de crecimiento, es posible que el año lo cerremos en 8%, superior al 6% del año pasado”, dijo.
El repunte de las remesas, que en 2016 totalizaron $3,949 millones y $2,178.6 millones hasta junio de este año, obedece, según Bautista, “a una mayor actividad económica en Estados Unidos”.
“En ese país, hasta agosto, el desempleo total bajó de 4.9% a 4.3% y el desempleo latino bajó de un 5.9% a un 5.2%. La mano de obra latina sigue siendo contratada fuertemente. Esos son puntos importantes. El 80% de las remesas viene de EUA”, dijo.
| PIB
El producto interno bruto mantuvo crecimientos inferiores al 4% en los últimos años: 2.8% (2013), 3.1% (2014), 3.6% (2015) y 3.6 (2016)
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Así como el escenario económico de Estados Unidos es positivo, el hondureño está dando señales más alentadoras que en los últimos cinco años.
El Índice Mensual de Actividad Económica (Imae) calculado a julio alcanzó un incremento ostensible de 5.2%, superior al registrado en julio de 2016 (2.9%).
Entre los sectores que han inyectado dinamismo a la economía figuran, en primera instancia, la intermediación financiera, seguros y fondos de pensiones, también la agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, industria manufacturera, comercio, correo y telecomunicaciones, transporte, almacenamiento, construcción, electricidad y agua.
La economía internamemente presenta una expansión. De acuerdo con el Imae, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) muestra un decrecimiento de la inflación.
El directorio del BCH, en la última revisión del programa monetario, ha estimado una reducción de la inflación de “0.5 puntos porcentuales (...), situándolo en 4.0% ± 1.0 puntos porcentuales”.
Para fortuna de los hondureños, el lempira que había comenzado el año (L 23.6205 por $1 en febrero) con un rimo de devaluación frenético, ha ganado fuerza en septiembre (L 23.3822 por $1).
Bautista, máxima autoridad de la política monetaria, estima que el fortalecimiento de las monedas de los socios comerciales ha incidido positivamente en el lempira.
“Los tipos de cambio de nuestros socios comerciales se han apreciado. México, Guatemala, la zona del euro, otros países de Centroamérica, exceptuando a Costa Rica y Nicaragua, han tenido revaluaciones muy importantes. En México, el dólar se cotizaba en 21.30 pesos, ahora el cambio está en 16.60. Casi se revaluó en cinco pesos. Guatemala que había llegado a casi ocho quetzales por dólar, ahora anda cerca de 7”, dijo Bautista.
“Tenemos una revaluación del lempira pequeña. Si comparamos con el 31 de diciembre de 2016, hemos visto una revaluación de 0.52%. Eso significa 12 centavos”, dijo Bautista. “Al principio hablábamos de una devaluación de 5%, ahora tenemos una revaluación. Ahora todo dependerá de las condiciones del mercado”.
