San Pedro Sula, Honduras.
Gracias a su dedicación, compromiso y pasión por ayudar a los demás, cuatro personas se han convertido en los finalistas para recibir el premio Quetglas 2017.
Los finalistas son tres varones que viven en Tegucigalpa y una mujer originaria de Comayagua; los cuatro han dedicado parte de su vida a ayudar a las personas que más lo necesitan.
Sobresalieron entre 47 personas que fueron nominadas, dijo el gerente de la Fundación Obras Sociales Vicentinas ( Osovi), Gerardo Fuentes.
Las diferentes obras que realizan Olga Zelaya, Raúl Lazo, Milton Fonseca y Rafael Domingo se caracterizan por que están llenas de amor y voluntad para servir a los que más lo necesitan.
Casayuda
Olga Zelaya (56 años) vive en Comayagua, es fundadora y directora de la Fundación Casayuda, lugar que desde hace 18 años se enfoca en atender a personas con discapacidad para que puedan desenvolverse en la sociedad.
Risoterapia
Raúl Lazo es un joven de 22 años que desde hace siete años se ha caracterizado por brindar apoyo a las personas que más lo necesitan a través del proyecto de risoterapia.
Raúl manifestó que lo hace por amor, y no espera nada a cambio; actualmente son más de 2,000 niños que ha apoyado.
Bencaleth
Rafael Domínguez, de 57 años, vive en Comayagüela, Francisco Morazán, es fundador de la casa hogar Bencaleth, que desde hace 27 años brinda alimentación y un hogar a los menores en estado de orfandad y que además padecen de alguna discapacidad física.
Proyectos
Milton Fonseca, desde pequeño sabía que cuando creciera ayudaría a las comunidades aledañas de Francisco Morazán, pues el mismo vivió las necesidades, por la que pasan cientos de pobladores. A través de los proyectos de mejoramiento que el profesional de 39 años ha hecho en seis comunidades, ha logrado mejorar la calidad de vida de más de 6,000 personas.
Los cuatro coinciden que es un honor ser finalistas para ganar el premio; sin embargo, su mayor recompensa es ver la alegría y agradecimiento de las personas a quienes han apoyado.
Este año, los premios serán diferentes, pues no contarán con la presencia física del creador, el padre Antonio Quetglas, quien falleció el 12 de junio. La dedicación, bondad e impulso del padre Antonio logró concretar decenas de obras y programas que están dirigidas hacia la población más vulnerable.
Gracias a su dedicación, compromiso y pasión por ayudar a los demás, cuatro personas se han convertido en los finalistas para recibir el premio Quetglas 2017.
Los finalistas son tres varones que viven en Tegucigalpa y una mujer originaria de Comayagua; los cuatro han dedicado parte de su vida a ayudar a las personas que más lo necesitan.
Sobresalieron entre 47 personas que fueron nominadas, dijo el gerente de la Fundación Obras Sociales Vicentinas ( Osovi), Gerardo Fuentes.
Las diferentes obras que realizan Olga Zelaya, Raúl Lazo, Milton Fonseca y Rafael Domingo se caracterizan por que están llenas de amor y voluntad para servir a los que más lo necesitan.
Casayuda
Olga Zelaya (56 años) vive en Comayagua, es fundadora y directora de la Fundación Casayuda, lugar que desde hace 18 años se enfoca en atender a personas con discapacidad para que puedan desenvolverse en la sociedad.
 Olga Manuela Zelaya es la fundadora de Casayuda.
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Raúl Lazo es un joven de 22 años que desde hace siete años se ha caracterizado por brindar apoyo a las personas que más lo necesitan a través del proyecto de risoterapia.
Raúl manifestó que lo hace por amor, y no espera nada a cambio; actualmente son más de 2,000 niños que ha apoyado.
 Raúl Alexander Lazo trabaja con el proyecto de Risoterapia.
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Rafael Domínguez, de 57 años, vive en Comayagüela, Francisco Morazán, es fundador de la casa hogar Bencaleth, que desde hace 27 años brinda alimentación y un hogar a los menores en estado de orfandad y que además padecen de alguna discapacidad física.
 Rafael Antonio Domínguez creo la casa hogar Bencaleth.
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Milton Fonseca, desde pequeño sabía que cuando creciera ayudaría a las comunidades aledañas de Francisco Morazán, pues el mismo vivió las necesidades, por la que pasan cientos de pobladores. A través de los proyectos de mejoramiento que el profesional de 39 años ha hecho en seis comunidades, ha logrado mejorar la calidad de vida de más de 6,000 personas.
 Milton Antonio Fonseca trabaja para mejorar las comunidades.
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Este año, los premios serán diferentes, pues no contarán con la presencia física del creador, el padre Antonio Quetglas, quien falleció el 12 de junio. La dedicación, bondad e impulso del padre Antonio logró concretar decenas de obras y programas que están dirigidas hacia la población más vulnerable.
