San Pedro Sula, Honduras.
Para enaltecer y continuar con el legado de servicio, solidaridad y entrega a favor de los más necesitados que enmarcó la vida del padre Antonio Quetglas, la fundación Obras Sociales Vicentinas (Osovi) reconocerá a quienes realizan la labor de ayuda a los más desposeídos.
Por cuarto año consecutivo se llevará a cabo la entrega del Premio Antonio Quetglas a la caridad.
Para este año no se contará con la presencia del padre Quetglas, quien entregó su alma al Creador el pasado 12 de junio en Tegucigalpa.
Los miembros de la junta directiva de Osovi y representantes de empresas patrocinadoras dieron a conocer, en conferencia de prensa detalles de la iniciativa y los requisitos que deben cumplir los postulados al galardón.
Las nominaciones ya iniciaron y cerrarán el domingo 27 de agosto, posteriormente habrá una evaluación de los perfiles para seleccionar a quién se le dará el reconocimiento durante una gala especial el 28 de septiembre.
Para mayor información sobre las bases de la convocatoria y pasos para la nominación y demás datos ingrese a la página www.premioquetglas.com.
“Con este premio se busca dar a conocer que hay muchas personas de buena voluntad que trabajan sencillamente para buscar el bienestar de otros sin esperar nada a cambio”, destacó el presidente de la fundación Osovi, Jesús Canahuati.
Canahuati detalló: “Queremos lograr dos objetivos: que estas personas se den a conocer, no para que se afamen, sino para que otros apoyen a las fundaciones y los trabajos que ellos realizan, y para darnos cuenta de la labor que hace mucha gente ayudando al prójimo”.
Refirió que el Premio Quetglas es un reflejo para que las obras del reverendo sean perpetuas y que también se mantenga vivo el espíritu vicentino en todos los hondureños.
Detalló que el padre Quetglas, con 56 años de sacerdocio, atendió las necesidades de los demás sin preocuparse por sí mismo.
La representante del Grupo Financiero Ficohsa, Gabriela Becerril, expresó sentirse orgullosa de que la institución pueda ser por cuarto año consecutivo el máximo patrocinador de este galardón.
Indicó que en Grupo Financiero Ficohsa tiene como visión clara actuar en favor de todas aquellas obras que exaltan el nombre de Honduras, sobre todo de aquellas iniciativas que son para los más desprotegidos.
Obra
El padre Antonio Quetglas se ganó el amor y reconocimiento de muchas personas de todas las edades, a quienes apoyó durante su labor en más de 22 años frente a la fundación Osovi.
El misionero vicentino nació en Santa Eugenia, España, el 9 de diciembre de 1931.
Luego de ser formado como sacerdote llegó a Honduras en 1963, donde realizó muchas obras sociales, siempre pensando en la protección de los más pobres, hasta el último momento de su vida.
Para enaltecer y continuar con el legado de servicio, solidaridad y entrega a favor de los más necesitados que enmarcó la vida del padre Antonio Quetglas, la fundación Obras Sociales Vicentinas (Osovi) reconocerá a quienes realizan la labor de ayuda a los más desposeídos.
Por cuarto año consecutivo se llevará a cabo la entrega del Premio Antonio Quetglas a la caridad.
Para este año no se contará con la presencia del padre Quetglas, quien entregó su alma al Creador el pasado 12 de junio en Tegucigalpa.
Los miembros de la junta directiva de Osovi y representantes de empresas patrocinadoras dieron a conocer, en conferencia de prensa detalles de la iniciativa y los requisitos que deben cumplir los postulados al galardón.
Las nominaciones ya iniciaron y cerrarán el domingo 27 de agosto, posteriormente habrá una evaluación de los perfiles para seleccionar a quién se le dará el reconocimiento durante una gala especial el 28 de septiembre.
Para mayor información sobre las bases de la convocatoria y pasos para la nominación y demás datos ingrese a la página www.premioquetglas.com.
“Con este premio se busca dar a conocer que hay muchas personas de buena voluntad que trabajan sencillamente para buscar el bienestar de otros sin esperar nada a cambio”, destacó el presidente de la fundación Osovi, Jesús Canahuati.
Canahuati detalló: “Queremos lograr dos objetivos: que estas personas se den a conocer, no para que se afamen, sino para que otros apoyen a las fundaciones y los trabajos que ellos realizan, y para darnos cuenta de la labor que hace mucha gente ayudando al prójimo”.
Refirió que el Premio Quetglas es un reflejo para que las obras del reverendo sean perpetuas y que también se mantenga vivo el espíritu vicentino en todos los hondureños.
Detalló que el padre Quetglas, con 56 años de sacerdocio, atendió las necesidades de los demás sin preocuparse por sí mismo.
La representante del Grupo Financiero Ficohsa, Gabriela Becerril, expresó sentirse orgullosa de que la institución pueda ser por cuarto año consecutivo el máximo patrocinador de este galardón.
Indicó que en Grupo Financiero Ficohsa tiene como visión clara actuar en favor de todas aquellas obras que exaltan el nombre de Honduras, sobre todo de aquellas iniciativas que son para los más desprotegidos.
Obra
El padre Antonio Quetglas se ganó el amor y reconocimiento de muchas personas de todas las edades, a quienes apoyó durante su labor en más de 22 años frente a la fundación Osovi.
El misionero vicentino nació en Santa Eugenia, España, el 9 de diciembre de 1931.
Luego de ser formado como sacerdote llegó a Honduras en 1963, donde realizó muchas obras sociales, siempre pensando en la protección de los más pobres, hasta el último momento de su vida.
| Detalles de las bases
1. Para este año, al Premio Antonio Quetglas podrán optar: Personas naturales, no instituciones o fundaciones.
2. Edad mínima del postulante deben ser de 15 años, hondureños o extranjeros residiendo en el país que tengan actuaciones de impacto y relevancia social, mejorando la integración y calidad de vida de los colectivos sociales más desfavorecidos, ayudándoles a superar sus limitaciones físicas, económicas o sociales. 3. Deben ser nominados por una persona que deberá presentar una memoria en la que se detalle la labor desarrollada, el tiempo del campo, asistencia, la singularidad, innovación de las medidas adoptadas y los resultados alcanzados. 4. Tiempo de asistencia a beneficiados. 5. Cumplimiento de valores cristianos y vicentinos como la sencillez, humildad y caridad. 6. Evidencia del resultado efectivamente obtenido. 7. Relevancia Social. 8. Innovación, singularidad del servicio brindado. 9. Sinergia con otras personas o instituciones. 10. Facilidad de réplica de la acción o proyecto a otras necesidades sociales. 11. No es premio póstumo. 12. No podrán participar personas o familiares relacionados a Osovi. |
