San Pedro Sula, Honduras.
Más de 140 propietarios han sometido sus unidades a las revisiones físico-mecánicas que exige la ley para otorgar el permiso y que puedan salir en excursiones durante Semana Santa.
Las instituciones que conforman el Comité Nacional de Prevención en Movilización Masiva (Conapremm) están inspecciones las unidades y verificando que los motoristas cuenten con la documentación necesaria.
El clase 3 Juan Alberto Avilés, de la Dirección Noroccidental de Tránsito, manifestó que a diferencia de otros años, la anuencia de los conductores es mucho mayor, lo que ha permitido que en dos semanas ya se registren más de 140 unidades revisadas, de las cuales unas 30 no han aprobado las inspecciones.
“Este año estamos viendo más colaboración de los motoristas. Otros años, en las primeras semanas solo revisamos una o dos unidades”, señaló.
Avilés detalló que las 30 unidades fueron rechazadas por no tener los papeles en regla, por tener daños en las llantas, en las puntas y el sistema de frenos, tienen hasta el 7 de abril, que se vencen las revisiones físico-mecánicas, para volver a someter las unidades.
Buses amarillos, rapiditos grandes y microbuses que saldrán en excursión a playas, como las de Tela, La Ceiba, Puerto Cortés y Omoa, han sido revisadas.
Autoridades estiman que serán revisadas más de tres mil unidades entre San Pedro Sula, La Ceiba, Choluteca y Tegucigalpa. Quienes no hayan revisado sus buses y pagado el permiso de L200 serán multados con el decomiso de la unidad. René Caballero, delegado del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre, dijo que quienes tengan el permiso de operación vencido de la desaparecida Dirección General de Transporte y estén censados no podrán revisar las unidades y no saldrán de la ciudad.
Más de 140 propietarios han sometido sus unidades a las revisiones físico-mecánicas que exige la ley para otorgar el permiso y que puedan salir en excursiones durante Semana Santa.
Las instituciones que conforman el Comité Nacional de Prevención en Movilización Masiva (Conapremm) están inspecciones las unidades y verificando que los motoristas cuenten con la documentación necesaria.
El clase 3 Juan Alberto Avilés, de la Dirección Noroccidental de Tránsito, manifestó que a diferencia de otros años, la anuencia de los conductores es mucho mayor, lo que ha permitido que en dos semanas ya se registren más de 140 unidades revisadas, de las cuales unas 30 no han aprobado las inspecciones.
“Este año estamos viendo más colaboración de los motoristas. Otros años, en las primeras semanas solo revisamos una o dos unidades”, señaló.
Avilés detalló que las 30 unidades fueron rechazadas por no tener los papeles en regla, por tener daños en las llantas, en las puntas y el sistema de frenos, tienen hasta el 7 de abril, que se vencen las revisiones físico-mecánicas, para volver a someter las unidades.
Buses amarillos, rapiditos grandes y microbuses que saldrán en excursión a playas, como las de Tela, La Ceiba, Puerto Cortés y Omoa, han sido revisadas.
Autoridades estiman que serán revisadas más de tres mil unidades entre San Pedro Sula, La Ceiba, Choluteca y Tegucigalpa. Quienes no hayan revisado sus buses y pagado el permiso de L200 serán multados con el decomiso de la unidad. René Caballero, delegado del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre, dijo que quienes tengan el permiso de operación vencido de la desaparecida Dirección General de Transporte y estén censados no podrán revisar las unidades y no saldrán de la ciudad.
