El Progreso, Honduras.
Con la visión de ayudar a los más necesitados y orar por la paz y unión familiar, la asociación de pastores de las iglesias evangélicas de esta ciudad desarrollarán este día la jornada El Progreso ayuna. El evento inicia a las 4:00 am en el parque Ramón Rosa. Están invitadas las autoridades municipales, policiales, empresarios y población en general.
Lesli Moncada de Moreno, pastora y miembro del comité organizador, informó que el fin de la actividad es hacer conciencia en las personas que todos pueden ayudar a los que no tienen ni que comer.
“Durante la mañana estaremos en oración para pedir por la paz en nuestra comunidad, la unidad familiar, en la tarde y en diferentes grupos visitaremos hogares de ancianos, niños y centro penal, regalaremos víveres, ropa y zapatos”.
Explicó que este es el momento de “que todos nos unamos para pedirle a Dios por la sociedad que está envuelta en hechos violentos que enlutan a la familia”.
La actividad se desarrolló por primera vez el año pasado y fue un éxito, en está ocasión esperan superar la cantidad de participantes de 2015. Pese a los esfuerzos de la Policía los índices de violencia en este y otros municipios del Valle de Sula se mantienen altos, los pastores creen que con oración y fe pueden bajar.
Con la visión de ayudar a los más necesitados y orar por la paz y unión familiar, la asociación de pastores de las iglesias evangélicas de esta ciudad desarrollarán este día la jornada El Progreso ayuna. El evento inicia a las 4:00 am en el parque Ramón Rosa. Están invitadas las autoridades municipales, policiales, empresarios y población en general.
Lesli Moncada de Moreno, pastora y miembro del comité organizador, informó que el fin de la actividad es hacer conciencia en las personas que todos pueden ayudar a los que no tienen ni que comer.
“Durante la mañana estaremos en oración para pedir por la paz en nuestra comunidad, la unidad familiar, en la tarde y en diferentes grupos visitaremos hogares de ancianos, niños y centro penal, regalaremos víveres, ropa y zapatos”.
Explicó que este es el momento de “que todos nos unamos para pedirle a Dios por la sociedad que está envuelta en hechos violentos que enlutan a la familia”.
La actividad se desarrolló por primera vez el año pasado y fue un éxito, en está ocasión esperan superar la cantidad de participantes de 2015. Pese a los esfuerzos de la Policía los índices de violencia en este y otros municipios del Valle de Sula se mantienen altos, los pastores creen que con oración y fe pueden bajar.
