Identifique la rinosinusitis de la gripe y resfriado

Los síntomas más comunes son obstrucción nasal, secreción por la nariz, dolor en algún sitio de la cara o cabeza

SAN PEDRO SULA.

La rinosinusitis se define como la inflamación de la mucosa de la nariz y senos paranasales; es un padecimiento ocasionado por diferentes causas y entre las más frecuentes están las infecciones respiratorias agudas y crónicas por virus o bacterias que afectan tanto en la edad pediátrica como en el adulto.

Los síntomas más comunes son obstrucción nasal, secreción por la nariz, dolor en algún sitio de la cara o cabeza, dolor en los dientes superiores y mal aliento, explica José Luis Treviño González, otorrinolaringólogo de México.

Puede presentar secreción nasal espesa. Y sensación de congestión en la cabeza, dolor de cabeza y dolor de dientes.

“Habitualmente inicia con una gripe, también conocida como rinitis aguda viral, ocasionando una inflamación primariamente de la mucosa de la nariz y posteriormente de los senos paranasales”.

“En la cara tenemos cavidades, con algunas nacemos y otras se van formando durante los primeros años de vida, entonces la mucosa, a consecuencia de alguno de estos síndromes gripales, se inflama, secreta moco, este se infecta, crea pus y se obstruyen ciertos orificios y no se pueden ventilar los senos paranasales y eso crea un ambiente para ocasionar la rinosinusitis”.

Cambios. Señala que hay senos maxilares localizados en la cara; senos etimoidales, ubicados en medio de los ojos; seno frontal, en la porción anterior de la frente, y uno más escondido que se llama seno esfenoidal, en la base del cráneo.

Cada uno de ellos arroja una sintomatología característica que produce algunas molestias que llevan al otorrino a sospechar que presenta un cuadro inflamatorio agudo o crónico.

No obstante, la inflamación se puede presentar en cualquiera de los senos paranasales, dos o tres al mismo tiempo, la sintomatología es muy similar. Sucede que en ocasiones se presenta en todos los senos llamándose pansinusitis, agrega Treviño González.

“El diagnóstico es clínico. El médico revisa al paciente; se le hace una rinoscopía anterior, se descongestionan los cornetes (estructuras de dentro de la nariz), y nos permite apreciar si hay escurrimiento de moco-pus.

Si no es posible lograrlo con este método, se introduce un fibroscopio o un endoscopio conectado a una cámara para observar las estructuras internas de la nariz y así asegurar más el diagnóstico”, explica.

“No es tan cierto que la rinosinusitis se trata con cirugía”, advierte. “Inicialmente se prescriben medicamentos”, asegura.

Tratamiento

Los lavados intranasales se pueden hacer en casa con soluciones fisiológicas o hipertónicas. En un litro de agua debe agregar una cucharadita de bicarbonato y otra de sal. Diluir muy bien y realizarlos con una jeringa de 20cc. Esta se llena o carga con la solución y se introduce en uno de los orificios nasales para barrer con la mucosidad. Al respirar se lleva todo el líquido al interior y no se va a pasar a la garganta. La solución tiene que salir por la otra fosa nasal para que funcione el tratamiento.