Las dislipidemias causan daño al corazón y el cerebro

Para disminuir los riesgos de sufrir de males cardiovasculares camine 30 minutos diarios y lleve una dieta baja en grasas apropiada a sus necesidades

San Pedro Sula

Las dislipidemias pueden llegar a producirle problemas cardiovasculares y aterosclerosis que afectan la salud en general.

David Kury Marcos, doctor en medicina interna, indica que se define dislipidemia a la presencia de elevación anormal de concentración de grasas en la sangre, siendo estas los triglicéridos, colesterol de alta densidad o colesterol bueno (HDL), colesterol de baja densidad o colesterol malo (LDL) y lipoproteína de muy baja densidad (VLDL).

El colesterol es una molécula presente en todos los seres vivos del reino animal, incluyendo al ser humano. Los triglicéridos son el principal tipo de grasa transportado por el organismo.

Indica que luego de comer, el organismo digiere las grasas de los alimentos y libera triglicéridos a la sangre.

El “colesterol bueno” es el encargado de atrapar al colesterol malo que circula por la sangre y conducirlo hacia el hígado, protegiendo al organismo de sus efectos nocivos. De ahí que para evitar la aterosclerosis se necesita mantener una proporción alta de HDL y baja de LDL.

Fomenta.

El especialista indica que las dislipidemias son una condición que se encuentra asociada al desarrollo de varias enfermedades como la obesidad, hipertensión arterial, diabetes mellitus, infarto agudo al miocardio, eventos vasculares cerebrales, entre otros, los cuales están implicados en una diminución en el tiempo y calidad de vida de los pacientes que lo padecen.

Algunos tipos de dislipidemia se deben a trastornos digestivos, hepáticos o de la glándula tiroides. Otros tipos de dislipidemia son de origen hereditario y aun otros son debidos a una mala nutrición o a una reacción anormal del organismo a la nutrición normal.

El sedentarismo, dietas ricas en grasas y tabaquismo son factores de riesgo importantes para acabar desarrollando la enfermedad, asegura Kury.

Generalmente no existen síntomas y puede haber depósitos de grasa en piel o tendones. Los triglicéridos muy elevados pueden ocasionar dolor abdominal y pancreatitis, además, ser causa frecuente de fatiga, zumbido de oídos y dolor ardoroso en miembros inferiores.

Su detección, por desgracia, se da cuando la enfermedad ya se encuentra en una etapa avanzada, manifestándose entonces los síntomas derivados de las complicaciones asociadas a la enfermedad. Entre los más graves destacan los infartos cerebrales, la pancreatitis aguda o las enfermedades coronarias.

El tratamiento de dislipidemia debe ser individualizado, atendiendo a las características del paciente y las consecuencias de la enfermedad.

“Es necesario contar con la intervención de un equipo de médicos especialistas, quienes evaluarán el tipo de medicamento a utilizar; por ejemplo, estatinas o fibratos según sean necesario, y por nutricionistas, quienes orientarán para llevar una alimentación saludable”, explica el experto.

Alimentación sana

La nutricionista Gloria Montoya Ham indica que la dieta baja en grasa (especialmente grasa saturada) es la base para poder mejorar los niveles de grasa en sangre.

Se establece en dos puntos importantes: reducción del consumo de azúcares simples y aumentar el consumo de hidratos de carbono complejos con alto contenido en fibra.

La base en la mejoría de las dislipidemias o grasa en sangre es la dieta. Los objetivos de esta pauta alimentaria son mejorar las expectativas y la calidad de vida. Las dietas bajas en grasa se clasifican y planifican según las necesidades particulares de cada persona, no es tan solo modificar los tipos de grasa.

Se basan también si se necesita disminuir sal, azúcar y aumentar niveles de fibra, por lo tanto su médico nutriólogo puede decidir entre las siguientes opciones: dieta para hiperlipemia baja en sal (trastornos cardiacos, hipertensión arterial etc.),

dieta para hiperlipemia sin azúcares de tipo solubles (diabetes mellitus y otros trastornos de absorción de azúcares) y dieta para hiperlipemia rica en fibra (pacientes con problemas de estreñimiento).

Basado en lo anterior, la importancia de que no copiemos o hagamos las dietas de amigos o que se bajan de las redes, ya que cada plan debe ser realizado conforme a la condición de salud.

Es importante que haga 30 minutos de actividad física diaria, le ayudará a mantener los niveles del lípidos.

Visita periódica al médico junto con un estilo de vida saludable con dieta hipocalórica (reducida en grasas), ejercicio regular, evitar el consumo de tabaco y omitir el consumo de alcohol.

Recomendaciones dietéticas

1. La alimentación deberá ser siempre equilibrada, saludable y variada. Elegir productos lácteos descremados o las nuevas opciones como ser de arroz o almendra. Carnes bajas en grasas y muy magras máximo 2-3 veces por semana.

2. Dar preferencia al pescado frente a la carne roja. Comer dos a tres veces a la semana pescado azul (sardinas, atún, salmón, entre otras), evitar las sopas o caldos ricos en grasa (de res, mondongo, tapado etc.) y huevos solo claras 2-3 veces a la semana.

Consuma con regularidad el salmón, ya que mantiene el nivel del colesterol HDL o colesterol bueno.

3. Las verduras y legumbres prepararlas al vapor/ horneadas o en su propio jugo. Consumir abundantes frutas, verduras, ensaladas, no usar aderezos altos en grasas, preferir uso de limón, sal o vinagres para aderezar y no consumir helados cremosos.

4. Evitar los alimentos ricos en hidratos de carbono simples como azúcar, miel, jaleas, caramelos, frutas en almíbar, mermeladas, compotas, confituras, así como los productos de pastelería y repostería tipo croissants, donas, entre otras.

5. No consumir alimentos precocinados y evitar el consumo de alcohol. Para condimentar se puede utilizar hierbas aromáticas, mostaza, vinagre, limón o vinagreta, sal con moderación. Utilizar aceite de canola en la elaboración de los platos.