En todo el mundo, más de 1.4 mil millones de adultos se enfrentan a enfermedades debido a la inactividad, según la OMS

Enfrentan a un riesgo más alto de enfermedad cardiaca, diabetes, demencia y ciertos tipos de cáncer

Estados Unidos

Atención, sedentarios: la vida sedentaria ha puesto a más de una cuarta parte de los adultos del mundo en riesgo de enfermedades graves, señala un estudio reciente.

Más de 1.4 mil millones de adultos se enfrentan a un riesgo más alto de enfermedad cardiaca, diabetes, demencia y ciertos tipos de cáncer porque hacen demasiada poca actividad física, concluyeron investigadores de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Los investigadores analizaron los hallazgos de cientos de encuestas que incluyeron a 1.9 millones de adultos de a partir de 18 años de edad en 168 países.

En 2016, casi un tercio de las mujeres y una cuarta parte de los hombres de todo el mundo no realizaban los niveles recomendados de actividad física para permanecer sanos, encontraron los investigadores. Las directrices semanales indican al menos 150 minutos de actividad física de intensidad moderada o 75 minutos de actividad física de intensidad vigorosa.

El estudio se publicó el 4 de septiembre en la revista The Lancet Global Health.

'A diferencia de otros riesgos importantes para la salud global, los niveles de actividad física insuficiente no se están reduciendo en todo el mundo, en promedio, y más de una cuarta parte de todos los adultos no alcanzan los niveles recomendados de actividad física para una buena salud', comentó en un comunicado de prensa de la revista la autora principal, Regina Guthold.

Las mujeres eran menos activas que los hombres en todas las regiones del mundo excepto en el este y el sureste de Asia.

Los aumentos en unos niveles ya bajos de actividad física en hombres y mujeres fueron particularmente preocupantes. La actividad física insuficiente aumentó en un 5 por ciento en los países con unos ingresos altos, y aumentó apenas un 0.2 por ciento en los países con unos ingresos bajos.

La transición a unas ocupaciones más sedentarias y al transporte motorizado en los países más ricos podría explicar los niveles más altos de inactividad, dijeron los investigadores.

Es importante que los gobiernos provean una infraestructura que fomente que se camine más y que se vaya al trabajo en bicicleta, así como la recreación y los deportes activos, anotaron.

Eliminar las desigualdades en los niveles de actividad física entre hombres y mujeres será crítico para lograr los objetivos globales de actividad, aseguró la coautora del informe, Fiona Bull. Y esto requerirá esfuerzos 'para fomentar y mejorar el acceso de las mujeres a oportunidades que sean seguras, asequibles y culturalmente aceptables', anotó.

Melody Ding, investigadora en la Universidad de Sídney, en Australia, fue autora de un editorial publicado junto al estudio en la revista. En el editorial, dijo que en ciertas partes del mundo las mujeres se enfrentan a más barreras ambientales, sociales y culturales para participar en la actividad física.

Es probable que esas restricciones contribuyan a los niveles generales bajos de actividad física. Por ejemplo, en Arabia Saudí e Irak, que son países muy restrictivos, más de la mitad de todos los adultos no eran suficientemente activos, encontró el estudio.

En comparación, alrededor de un 40% de los adultos de Estados Unidos y un 36% de los adultos británicos hacen demasiada poca actividad.

Además, 'aunque los países con ingresos altos tienen una mayor prevalencia de actividad física insuficiente, es importante anotar que los países con ingresos bajos y medios siguen enfrentándose a una mayor carga de enfermedad global por la inactividad física', escribió Ding.

Más información

El Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre de Estados Unidos ofrece una guía para la actividad física.