El ejercicio en el embarazo evita la diabetes gestacional

Caminar es una forma de ejercicio segura durante los nueve meses de espera. Puede practicar yoga o hacer ejercicio aeróbico

SAN PEDRO SULA.

La embarazada puede hacer ejercicio diario que le permita mantener un peso saludable, reducir el riesgo de padecer de diabetes gestacional y preclancia.

El estado nutricional de la mujer cuando queda embarazada y durante el embarazo tiene una influencia importante en los resultados sanitarios del feto, el lactante y la madre.

El ginecólogo y obstetricia José Palomo comenta que las deficiencias de micronutrientes como el calcio, el hierro, la vitamina A o el yodo producen malos resultados sanitarios para la madre y ocasiona complicaciones en el embarazo, poniendo en peligro a la madre y el niño.

Un aumento insuficiente del peso de la madre durante el embarazo debido a una dieta inadecuada aumenta el riesgo de parto prematuro, bajo peso al nacer y defectos congénitos. Además, el riesgo de desarrollar la diabetes gestacional en la mujer.

El experto indica que se le da a la mujer asesoramiento sobre el consumo de suplementos de micronutrientes recomendados durante el embarazo, por ejemplo, suplementos de micronutrientes múltiples que contengan hierro y ácido fólico.

La diabetes gestacional es un tipo de diabetes que aparece por primera vez durante el embarazo en mujeres embarazadas que nunca antes padecieron esta enfermedad.

A la embarazada que se le detecta diabetes gestacional debe seguir un tratamiento que implica la toma de medicamentos para controlar la glucosa o azúcar en la sangre y debe hacer ejercicio diario, además de controlar su peso con una dieta balanceada.

'Pregnant woman sitting on a workout ball after her workout, isolated on white background.'

La embarazada puede hacer pilates para aliviar los problemas de dolores de espalda.

Activa

La licenciada Suyapa Padilla indica que hacer ejercicio durante el embarazo da resultados maravillosos para su salud, puesto que mejora su estado de ánimo, le permite dormir mejor y disminuye los dolores y molestias típicos del embarazo.

Otros beneficios son que la “entrena” para el parto, fortaleciendo los músculos y mejorando la resistencia, y hace que recupere más rápidamente la forma después del nacimiento de su bebé.

Comenta que hacer ejercicio durante el embarazo aminora el riesgo de desarrollar diabetes gestacional y preclancia. Si le han diagnosticado diabetes gestacional, el ejercicio podría ayudarte a controlar esta condición y prevenir complicaciones.

El Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos recomienda a las mujeres saludables que no hayan tenido complicaciones en el embarazo que intenten hacer de 20 a 30 minutos de actividad física moderada la mayoría o todos los días de la semana.

Padilla indica que el ejercicio es otra manera de controlar el azúcar en la sangre y nivelar el consumo de alimentos.

Después de consultar a su médico ejercítese de manera regular durante y después del embarazo.

Procure hacer un mínimo de 30 minutos de actividad física, de moderada a intensa, al menos cinco días a la semana. Esto puede ser caminar a paso rápido, nadar o jugar activamente con los niños.

Alerta

Pare de hacer ejercicio si está padeciendo estos síntomas: tiene una hemorragia vaginal, se marea, cree que se va a desmayar o nota dolor en el pecho.

Le duele la cabeza. Piensa que el bebé se mueve menos que antes, tiene contracciones, nota debilidad muscular, las piernas le duelen o las tiene hinchadas y siente que le falta el aire antes de empezar un ejercicio.

Actividades seguras en el embarazo

1. Caminar. Es una de las mejores actividades cardiovasculares para las mujeres embarazadas que la mantiene en forma sin castigar las rodillas y los tobillos. Otra ventaja es que se puede hacer en cualquier lugar, no requiere ningún equipo especial.

2. Los ejercicios de yoga fortalecen los músculos y lo mantien flexible, con la ventaja de que no ejercen nada o casi nada de impacto sobre las articulaciones. Si quiere trabajar también el corazón tendrá que añadirle dos o tres días de caminatas.

Ethnic mother stretching while sitting on yoga mat at home

El yoga es otra de los ejercicios que puede hacer la embarazada, pero siempre es necesario que cuente con la asistencia de un entrenador.
3. Los ejercicios aeróbicos fortalecen el corazón y tonifican los músculos. Asimismo, si se inscribe en una clase especial para embarazadas tendrá la seguridad de que todos los movimientos son sanos para usted y su bebé. Hágalo tres veces a la semana.

4. Puede practicar ejercicio beneficioso para el corazón bailando al ritmo de su música favorita en su propia sala, siguiendo la coreografía de un DVD o inscribiéndose en una clase de baile. Lo único que debe evitar son los saltos y las piruetas.

5. La natación, el mejor ejercicio para las embarazadas y también el más seguro. La natación es ideal porque trabaja los músculos de las piernas y brazos, ofrece beneficios cardiovasculares, reduce la hinchazón y permite que la embarazada se sienta ligera.

Claves para no subir de peso

La nutrióloga Victoria Palomo comenta que Sa obesidad es una enfermedad crónica, de etiología multifactorial, que se caracteriza por una acumulación excesiva de grasa corporal.

La mayor causa de obesidad es un aumento en la ingesta de alimentos ricos en grasas y azúcares, y un menor gasto energético.

La obesidad en la mujer embarazada multiplica el riesgo de desarrollar preclancia, aborto, diabetes mellitus gestacional, parto por cesárea y complicaciones durante el parto. En el feto aumenta el riesgo de malformaciones fetales, parto prematuro y muerte fetal.

El embarazo no es el momento ideal para iniciar una dieta baja en calorías, sin embargo, la dieta debe ser balanceada para cada trimestre del embarazo y durante la lactancia. Se recomienda un aumento de 12-15 libras en el embarazo con obesidad.

Aparte de la dieta se debe realizar ejercicio físico, controlar el estrés, evitar la ansiedad y consumir ácido fólico.

Se recomienda tener un peso ideal previo al embarazo, el consumo de ácido fólico y una dieta equilibrada. Una alimentación adecuada proporciona los nutrientes para favorecer el crecimiento y desarrollo normal del bebé. Se necesitan de 300-500 calorías extra para llevar un embarazo saludable.