Estados Unidos.
Las mujeres deben ser conscientes de que su riesgo de cáncer de ovario aumenta con la edad. La mitad de todos los casos afectan a las mujeres de a partir de 63 años de edad, según especialistas del Centro Oncológico Fox Chase, en Filadelfia.
Pero el centro recuerda a todas las mujeres que es necesario que sean conscientes de los otros factores de riesgo de la enfermedad, además de las señales de advertencia comunes del cáncer de ovarios; por ejemplo, inflamación o hinchazón del vientre, dolor del vientre bajo y dolor de espalda.
Además, dificultades para comer o sentirse llena rápidamente, una pérdida de peso que no puede explicar, dolor durante las relaciones sexuales, cambios en la menstruación, un cambio en los hábitos a la hora de ir al baño -como estreñimiento, diarrea o tener que orinar con mucha urgencia o con mucha frecuencia-.
“Aunque esos síntomas son comunes y pueden ser provocados por otras cosas, además del cáncer de ovarios, aconsejo a las mujeres que los tomen en serio”, comentó la doctora Christina Chu, oncóloga ginecológica del Fox Chase.
Intenso.
“Una mujer sabe qué es normal en su propio cuerpo. Si sus síntomas no parecen normales y duran dos semanas o más debe informar al médico”, manifestó Chu.
El cáncer de ovario conforma alrededor de un 3% de todos los cánceres en las mujeres, pero provoca más muertes que ningún otro cáncer del sistema reproductivo femenino, informa la Sociedad Americana contra el Cáncer.
Aparte de una mayor edad, el centro dice que los factores de riesgo del cáncer de ovarios incluyen antecedentes familiares de cáncer de ovarios, mama o colon.
Mientras más parientes tengan la enfermedad mayor es el riesgo. Una mutación genética heredada: hasta un 10% de los cánceres de ovarios surgen de una mutación genética heredada, como las mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2. Otras mutaciones genéticas que provocan ciertos síndromes también se asocian con el cáncer de ovarios y de otros tipos.
El historial reproductivo: tener un embarazo a tiempo completo antes de los 26 años de edad puede reducir el riesgo de la enfermedad. Mientras más hijos tienen las mujeres, más bajo es su riesgo de cáncer de ovarios. La lactancia también reduce el riesgo de este tipo de cáncer en las mujeres. Métodos anticonceptivos: usar pastillas anticonceptivas durante apenas de tres a seis meses podría reducir el riesgo de cáncer de ovarios.
Tomarlas durante más tiempo podría aminorar las probabilidades de padecer la enfermedad. Este beneficio de la píldora podría persistir durante muchos años después de que las mujeres dejen de tomarla.
La terapia hormonal: la terapia de reemplazo hormonal tras la menopausia podría aumentar el riesgo de cáncer de ovarios, sobre todo si el estrógeno sin progesterona se toma durante más de cinco años. Otros factores de riesgo: la obesidad y el cáncer de mama también podrían elevar las probabilidades de una mujer de desarrollar cáncer de ovarios.
”Aconsejo a las mujeres que tengan antecedentes familiares de cánceres como el de mama, ovarios, colon y endometrial, que hablen con el médico sobre su historial de riesgo, de forma que puedan determinar juntos cuáles son los próximos pasos”, planteó Chu.
