Estados Unidos
Un equipo internacional de investigadores ha reportado el primer caso de un bebé que desarrolló glaucoma después de ser expuesto al virus del Zika en el útero.
En ningún caso anterior se ha observado un vínculo entre la infección con el Zika y el glaucoma, una enfermedad que puede dañar de forma permanente al nervio óptico y dar lugar a la ceguera, dijeron los investigadores. Pero otros problemas de visión y defectos cerebrales devastadores han aparecido en los bebés nacidos de madres que se infectaron con el Zika cuando estaban embarazadas.
'Identificamos el primer caso en que el virus del Zika parece haber afectado al desarrollo de la cámara anterior, o la porción frontal, del ojo durante la gestación y provocado glaucoma después del nacimiento', dijo en una declaración el coautor del estudio, el doctor Albert Icksang Ko, profesor en la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Yale, en New Haven, Connecticut.
Ko ha estado trabajando con médicos en Brasil desde que empezó allí el brote de Zika en abril de 2015, en un esfuerzo de colaboración para comprender mejor el rango de los defectos congénitos provocados por el virus trasmitido por los mosquitos.
Durante el trascurso de su investigación, los investigadores encontraron a un chico de 3 meses que se había expuesto al Zika cuando estaba en el útero. Aunque no había señales de glaucoma en el momento en que nació, el bebé desarrolló más tarde una hinchazón, dolor y lagrimeo en su ojo derecho, indicaron los investigadores. Los médicos diagnosticaron un glaucoma y realizaron una operación para aliviar la presión dentro del ojo del niño.
El caso aparece en la edición en línea del 30 de noviembre de la revista Ophthalmology.
Los médicos deben ser conscientes de que el glaucoma es otro síntoma grave de la infección con el Zika que debería monitorizarse en los bebés, dijeron los autores del estudio. Y se necesita más investigación para determinar con exactitud cómo se produce el glaucoma en los bebés con Zika.
La mayoría de los adultos infectados con el Zika presentan síntomas leves. Pero los bebés de mujeres que contraen la infección durante el embarazo pueden sufrir unos defectos congénitos devastadores, el más habitual de los cuales es la microcefalia, en que el cerebro está poco desarrollado y la cabeza tiene un tamaño anómalamente pequeño.
Y una investigación reciente sorprendente publicada la semana pasada reportó que los fetos expuestos al virus del Zika pueden parecer normales al nacer y mostrar más adelante las señales de microcefalia y otras anomalías cerebrales.
En ese estudio, los científicos encontraron que 13 bebés en Brasil que fueron expuestos al virus transmitido por los mosquitos en el útero tenían la cabeza de tamaño normal al nacer, pero luego experimentaron un crecimiento más lento de la cabeza.
Once de esos bebés fueron diagnosticados con microcefalia y otras complicaciones neurológicas asociadas con el síndrome del Zika, reportaron los investigadores.
'Entre los bebés de madres expuestas al virus del Zika durante el embarazo, la ausencia de microcefalia al nacer no descarta la infección congénita con el virus del Zika ni la presencia de anomalías cerebrales relacionadas con el Zika', dijeron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. en un comunicado de prensa.
Estos hallazgos subrayan la necesidad de la evaluación continua de los recién nacidos con una exposición posible al Zika en el útero, dijeron los CDC cuando se publicó el informe.
Los hallazgos también resaltan la 'importancia de unas neuroimágenes tempranas de los bebés expuestos al virus del Zika prenatalmente', añadió la agencia.
Aunque todos esos bebés arrojaron resultados positivos respecto a la exposición al Zika en el útero, el crecimiento anómalo de la cabeza no se detectó hasta al menos los 5 meses de edad, según el informe.
Los CDC animan a todas las personas (especialmente a la mujeres embarazadas) que tomen medidas para protegerse de las picaduras de mosquitos. Deberían usar un repelente de insectos registrado por la Agencia de Protección Ambiental que contenga uno de los siguientes ingredientes: DEET, picaridina, IR3535, aceite de eucalipto de limón o para-mentano-diol, o 2-undecanona. También deberían llevar camisas de manga larga y pantalones largos, usar o reparar los mosquiteros en las ventanas y las puertas, usar aire acondicionado cuando sea posible, y retirar el agua estancada del interior o del exterior donde los mosquitos puedan depositar huevos.
Hasta el 23 de noviembre, un estimado de 182 de más de 4,400 casos reportados de infección con el Zika en Estados Unidos fueron causados por mosquitos, según los CDC. Florida y Texas son los únicos dos estados que han reportado casos de infección local trasmitida por mosquitos. Aunque el virus normalmente se propaga a través de la picadura de los mosquitos, también se puede propagar a través del contacto sexual.
La mayoría de las infecciones reportadas en Estados Unidos se originaron en áreas de Latinoamérica y el Caribe, donde los casos de Zika han llegado a proporciones de epidemia.
Un equipo internacional de investigadores ha reportado el primer caso de un bebé que desarrolló glaucoma después de ser expuesto al virus del Zika en el útero.
En ningún caso anterior se ha observado un vínculo entre la infección con el Zika y el glaucoma, una enfermedad que puede dañar de forma permanente al nervio óptico y dar lugar a la ceguera, dijeron los investigadores. Pero otros problemas de visión y defectos cerebrales devastadores han aparecido en los bebés nacidos de madres que se infectaron con el Zika cuando estaban embarazadas.
'Identificamos el primer caso en que el virus del Zika parece haber afectado al desarrollo de la cámara anterior, o la porción frontal, del ojo durante la gestación y provocado glaucoma después del nacimiento', dijo en una declaración el coautor del estudio, el doctor Albert Icksang Ko, profesor en la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Yale, en New Haven, Connecticut.
Ko ha estado trabajando con médicos en Brasil desde que empezó allí el brote de Zika en abril de 2015, en un esfuerzo de colaboración para comprender mejor el rango de los defectos congénitos provocados por el virus trasmitido por los mosquitos.
Durante el trascurso de su investigación, los investigadores encontraron a un chico de 3 meses que se había expuesto al Zika cuando estaba en el útero. Aunque no había señales de glaucoma en el momento en que nació, el bebé desarrolló más tarde una hinchazón, dolor y lagrimeo en su ojo derecho, indicaron los investigadores. Los médicos diagnosticaron un glaucoma y realizaron una operación para aliviar la presión dentro del ojo del niño.
El caso aparece en la edición en línea del 30 de noviembre de la revista Ophthalmology.
Los médicos deben ser conscientes de que el glaucoma es otro síntoma grave de la infección con el Zika que debería monitorizarse en los bebés, dijeron los autores del estudio. Y se necesita más investigación para determinar con exactitud cómo se produce el glaucoma en los bebés con Zika.
La mayoría de los adultos infectados con el Zika presentan síntomas leves. Pero los bebés de mujeres que contraen la infección durante el embarazo pueden sufrir unos defectos congénitos devastadores, el más habitual de los cuales es la microcefalia, en que el cerebro está poco desarrollado y la cabeza tiene un tamaño anómalamente pequeño.
Y una investigación reciente sorprendente publicada la semana pasada reportó que los fetos expuestos al virus del Zika pueden parecer normales al nacer y mostrar más adelante las señales de microcefalia y otras anomalías cerebrales.
En ese estudio, los científicos encontraron que 13 bebés en Brasil que fueron expuestos al virus transmitido por los mosquitos en el útero tenían la cabeza de tamaño normal al nacer, pero luego experimentaron un crecimiento más lento de la cabeza.
Once de esos bebés fueron diagnosticados con microcefalia y otras complicaciones neurológicas asociadas con el síndrome del Zika, reportaron los investigadores.
'Entre los bebés de madres expuestas al virus del Zika durante el embarazo, la ausencia de microcefalia al nacer no descarta la infección congénita con el virus del Zika ni la presencia de anomalías cerebrales relacionadas con el Zika', dijeron los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU. en un comunicado de prensa.
Estos hallazgos subrayan la necesidad de la evaluación continua de los recién nacidos con una exposición posible al Zika en el útero, dijeron los CDC cuando se publicó el informe.
Los hallazgos también resaltan la 'importancia de unas neuroimágenes tempranas de los bebés expuestos al virus del Zika prenatalmente', añadió la agencia.
Aunque todos esos bebés arrojaron resultados positivos respecto a la exposición al Zika en el útero, el crecimiento anómalo de la cabeza no se detectó hasta al menos los 5 meses de edad, según el informe.
Los CDC animan a todas las personas (especialmente a la mujeres embarazadas) que tomen medidas para protegerse de las picaduras de mosquitos. Deberían usar un repelente de insectos registrado por la Agencia de Protección Ambiental que contenga uno de los siguientes ingredientes: DEET, picaridina, IR3535, aceite de eucalipto de limón o para-mentano-diol, o 2-undecanona. También deberían llevar camisas de manga larga y pantalones largos, usar o reparar los mosquiteros en las ventanas y las puertas, usar aire acondicionado cuando sea posible, y retirar el agua estancada del interior o del exterior donde los mosquitos puedan depositar huevos.
Hasta el 23 de noviembre, un estimado de 182 de más de 4,400 casos reportados de infección con el Zika en Estados Unidos fueron causados por mosquitos, según los CDC. Florida y Texas son los únicos dos estados que han reportado casos de infección local trasmitida por mosquitos. Aunque el virus normalmente se propaga a través de la picadura de los mosquitos, también se puede propagar a través del contacto sexual.
La mayoría de las infecciones reportadas en Estados Unidos se originaron en áreas de Latinoamérica y el Caribe, donde los casos de Zika han llegado a proporciones de epidemia.
