Emma Coronel, la joven esposa del narcotraficante mexicano Joaquín Guzmán Loera, se ha convertida en una de las protagonistas del mediático juicio que se celebra contra el ex jefe del cartel de Sinaloa en Nueva York.
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Coronel ha llegado bajo la lluvia a las dos audiencias celebradas hasta ahora en la corte de Brooklyn.
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Coronel llegó con prisa y se negó a dar declaraciones a los medios de comunicación que la rodearon. 'Por favor, permiso, voy tarde', dijo tratando de abrirse paso. Vestía un traje negro y llevaba el cabello recogido.
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Al ingresar a la sala de la corte Joaquín 'El Chapo' Guzmán buscó a su esposa entre los miembros de la audiencia y le lanzó un beso.
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Emma se sentó en la segunda fila, detrás de los dibujantes y los pocos periodistas a los que ha sido permitido el ingreso al juicio.
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Según Univision, la ex reina de belleza afirmó que los dibujos de los artistas de la corte no son de su agrado porque 'la hacen ver más gorda de lo que está'.
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El Chapo, vestido de traje oscuro y corbata, escucha atento a los testigos que la fiscalía ha presentado y a veces toma notas que pasa a uno de sus abogados. Otras veces, fija la mirada en su joven esposa de 29 años, sentada en la sala.
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Emma también se quejó por la corbata que usó El Chapo en su primer audiencia, afirmando que no era la que ella le había regalado.
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Emma, que no ha faltado a las audiencias del Chapo, publicó varias imágenes de su llegada a la corte en su cuenta de Instagram.
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'No importa lo que pase, te prometí estar siempre y aquí estoy. Te amaré toda mi vida', escribió la ex reina de belleza.
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La semana pasada, el juez negó a ambos la posibilidad de abrazarse antes del inicio de esta audiencia.
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Coronel ha brindado declaraciones a los medios de comunicación denunciando las supuestas torturas a las que es sometido su esposo en una cárcel de máxima seguridad en Nueva York.