El empresario hondureño Roberto Contreras, dueño de los restaurantes Power Chicken, tuvo un lindo gesto con los pobladores de varias colonias de San Pedro Sula.
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Consciente de la crisis sanitaria y económica, generada por la pandemia del COVID-19, el empresario regaló 3,000 gallinas de su granja a los pobladores de varias colonias de San Pedro Sula, aledañas al sector en donde tiene una propiedad.
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El dueño de Power Chicken se encargó de que se mantuviera un orden al momento de entrar a la propiedad. A cada persona fue marcando para que solo reciberan una gallina por familia.
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Las 3,000 gallinas se entregaron en colonias como la Callejas, Flor del Campo, San Vicente de Paúl y otras del sector noreste de San Pedro Sula.
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Los empleados de Power Chicken también se unieron en el orden de la entrega de las gallinas; unos hasta recibieron huevos.
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Las colonias en donde se entregaron las gallinas son pobladas por personas que viven del día a día, y otras desempleados, es en ese sentido que el empresario Roberto Contreras tuvo la acción solidaria.
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A pesar de no estar generando ingresos por no estar operando los restaurantes Power Chicken, el empresario Roberto Contreras decidió ayudar a las personas que no tienen qué comer. Asimismo, ha informado que sus empleados continúan recibiendo su salario.
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En reiteradas ocasiones, el dueño de Power Chicken ha solicitado al presidente de Honduras que se deje operar a los restaurantes con servicio de autoservicio y a domicilio, para que la economía no sufra tanto y se puedan mantener miles de empleos.
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Roberto Contreras denunció que la Empresa Energía Honduras (EEH) le cobró el consumo de energía eléctrica a sus restaurantes, aún y cuando estos permanecen cerrados por la cuarentena.
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Con la entrega de las gallinas, más de 3,000 personas se ven beneficiadas con esta acción.
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A pie o en bicicleta, las personas de las colonias Callejas, Flor del Campo, San Vicente de Paúl, entre otras, llegaron temprano para poder recibir una gallina.
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Foto: La Prensa
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Foto: La Prensa
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Debido a que la EEH promedió las facturas eléctricas, el dueño de Power Chicken se puso en huelga de hambre porque le cobraron energía que no consumieron sus restaurantes que permanecen cerrados.