Los niños son muy curiosos y se distraen con facilidad, por ende es muy difícil para ellos mantener la concentración en sus tareas y estudios.
La concentración es pieza clave en el proceso de aprendizaje. Sin concentración no se puede aprender nada nuevo.
Tome nota de las siguientes recomendaciones:
1. Un lugar adecuado: Para estudiar o hacer una tarea es importante que sea en una zona con bien iluminada y sin sonidos que perturben la atención del pequeño.
2. Evitar distracciones: A la hora de realizar las tareas escolares es necesario que el menor no esté cerca de aparatos electrónicos como televisores, equipos de sonido, celulares, tablets, etcétera.
3. Subrayar y hacer resúmenes: Esta es una buena técnica para los niños que tienen problemas para concentrarse.
4. Buena alimentación: Otro de los factores que influye en la concentración de los niños es una alimentación equilibrada. Recuerde que el desayuno es la comida más importante del día, procure que sea un desayuno completo. No olvide que las frutas y verduras son muy importantes dentro de la dieta del niño.
5. Contacto con la naturaleza: Cuando los pequeños pasan tiempo al aire libre su cerebro se oxigena y esto ayuda a mejorar la concentración.
6. Practicar ejercicios de concentración: Existen muchos juegos que son de gran ayuda para la mente. Los pequeños pueden ejercitar su cerebro practicando entretenidos juegos como rompecabezas, laberintos, sopas de letras y juegos de mesa como naipes, dominó y parchis.
7. Descansos durante el estudio: Durante el tiempo que se está realizando una tarea o estudiando para un exámen es necesario que el niño tome un momento de descanso. El cerebro se cansa de estar en la misma actividad por mucho tiempo, por eso no es recomendable que el pequeño estudie sin hacer breves recesos.
