La cantante Billie Eilish ha asegurado en varias ocasiones que siempre ha sido una defensora y fan acérrima del también intérprete Justin Bieber, pero hasta ahora nadie sabía a ciencia cierta el nivel de obsesión que la joven estrella del pop llegó a desarrollar a cuenta del astro canadiense.
Su madre Maggie, nada menos que en el nuevo programa radiofónico de su famosa hija, ha ilustrado esta semana a los oyentes sobre la relación -impersonal, por supuesto- tan curiosa que la artista llegó a forjar con su ídolo pop, al parecer algo más 'intensa' que la que vivieron otras adolescentes de su generación.
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Para resumir, hay que decir que los progenitores de la vocalista, de 18 años, estuvieron a punto de llevarla a terapia psicológica para apaciguar ligeramente su pasión por el ahora marido de Hailey Baldwin, ya que a veces Billie no podía evitar llorar amargamente, 'rota de dolor', según su madre, al no haber tenido oportunidad de conocerle personalmente.
'Es que era demasiado intenso, pensamos en llevarte a terapia porque estabas rota de dolor. Cuando lanzó una nueva canción y la escuchaste en el coche, no podías parar de llorar. Me acuerdo de que te llevé al estudio y al volver a casa todavía estabas llorando por el tema', le ha recordado Maggie en medio de su conversación.