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Recuerdan abusos de Franco Zeffirelli tras su muerte

  • 19 junio 2019 /

Las presuntas víctimas del director italiano han rememorado los abusos del cineasta, fallecido a sus 96 años el 15 de junio en Roma.

Italia.

El actor Johnathon Schaech estaba retirando un árbol caído de su patio trasero, en Nashville, el fin de semana, cuando su teléfono empezó a vibrar al recibir mensajes. El director italiano Franco Zeffirelli había muerto en su hogar en Roma, a la edad de 96 años, y los amigos de Schaech se estaban comunicando, preocupados por lo que la noticia del deceso del realizador podría provocar en él.

Uno de los amigos que le enviaron un mensaje de texto era un pastor luterano de Long Island llamado Justin Vetrano, de 45, con quien Schaech comparte un vínculo doloroso: ambos hombres señalan que Zeffirelli los agredió sexualmente cuando eran actores jóvenes, informó The Hollywood Reporter.

En enero del 2018, Schaech se convirtió en uno de los pocos acusadores varones del movimiento #MeToo en Hollywood cuando detalló, a la revista People, supuestos incidentes con Zeffirelli en 1993, en el set de una de las películas menos vistas del director, el drama italiano La Novicia.

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Schaech reveló que Zeffirelli lo acosó y humilló sexualmente durante la filmación, y que en cierto momento, se introdujo a la habitación de hotel del actor en Sicilia mientras Schaech dormía y trató de practicarle sexo oral.

Vetrano, un ex actor infantil quien ahora habla públicamente por primera vez, declara que Zeffirelli lo atacó sexualmente en 1991, cuando Vetrano tenía 18 años y visitaba el hogar del primo de su padre, el agente de talentos Ed Limato.

Contactado ayer vía telefónica en Italia, el hijo de Zeffirelli, Pippo, comentó sobre las acusaciones de los hombres: 'no es momento de hablar de esto... no es el momento apropiado'.

Los casos de estos hombres son similares a las compartidas por muchas actrices en el movimiento #MeToo, y Schaech dijo que se sintió inspirado a alzar la voz luego de que Rose McGowan describió una presunta violación por parte de Harvey Weinstein (el productor ha negado acusaciones de sexo no consensuado).

'Fue brutal conmigo', dice Schaech sobre Zeffirelli. 'Nunca creí en mí mismo después de eso. Fue como si te robaran la vida. Pero cuando murió, me di cuenta que puedo perdonarlo'.

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Cuando conoció a Zeffirelli, Vetrano había estado trabajando como actor desde los cinco años, apareciendo en comerciales y telenovelas, con uno de sus papeles más memorables en un anuncio de Jello Pudding Pop con Bill Cosby.

Zeffirelli, entonces de 68 años, era conocido por sus suntuosas producciones de óperas, populares adaptaciones cinematográficas de Shakespeare y su enfoque de 'más es mejor' en las artes.

Había sido nominado a un Óscar por dirigir el éxito taquillero de 1968, Romeo y Julieta, y había dirigido a una serie de estrellas importantes, como Elizabeth Taylor y Richard Burton en La Fierecilla Domada, Brooke Shields en Amor Eterno y Mel Gibson en Hamlet.

Cuando tenía 18 años, Vetrano se mudó de Nueva York a Los Ángeles para dedicarse a la actuación de tiempo completo, y se mudó con Limato, a quien consideraba un tío.

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Los amigos de Limato introdujeron a Vetrano a un estilo de vida hollywoodense glamoroso y a veces incómodamente libertino, que culminó cuando Zeffirelli llegó a Los Ángeles en 1991 para una reunión con Warner Bros. para potencialmente dirigir la cinta de El Fantasma de la Ópera y se hospedó en la casa de Limato.

'Él me hacía cumplidos exagerados', recuerda Vetrano. 'Bebía mucho. Me atacó una noche y no me dejó salir del cuarto. Me agredió sexualmente. Duró entre cinco y ocho minutos. Me paralicé por completo y quedé en shock y no podía creer lo que me estaba sucediendo.

'Cuando lo alejé de un empujón, me dijo que yo era un don nadie. Que nunca sería un artista de verdad. Como un joven actor, creí lo que me dijo'.

Vetrano declara que no le dijo a nadie del incidente y renunció a la actuación meses después.