Manejar en estado de ebriedad, actuar por impulso, un descuido o pura mala suerte: esas son algunas de las causas por las que varios famosos acabaron por convertirse en homicidas involuntarios.
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El caso más reciente es el del actor mexicano Pablo Lyle, a quien la Policía de Miami abrió una investigación por el incidente en el que el protagonista de telenovelas como La sombra del pasado o Una familia con suerte, golpeó a Juan Ricardo Hernández, un cubano de 63 años, quien falleció días después, presuntamente a consecuencia de ese golpe. Lyle agredió al señor tras una discusión en la calle.
Será hasta el primero de mayo cuando se conozca cuál será la sentencia de Lyle.
En 2003, Flavio Peniche mató a su colega Antonio Velazco en la filmación de la película Juana la Alacrana. En una de las escenas, el hermano de Arturo Peniche le disparaba a Velazco, pero desgraciadamente las balas eran de verdad.
El actor Pablo Lyle está bajo arresto domiciliario en Miami, tras haber pagado la fianza de $50,000 impuesta por un juez estadounidense por la muerte de un cubano al que golpeó la semana pasada.
También se le retiró el pasaporte y se le ordenó andar con grillete. Ayer se revelaron los resultados de la autopsia de Juan Hernández, el hombre que mató Lyle. El señor de 63 años falleció por “complicaciones por trauma cerebral contundente”, lo que podría ser una prueba para que el actor sea condenado a la cárcel.
Matthew Broderick: en agosto de 1987, durante unas vacaciones en Irlanda, el actor estadounidense conducía un carro por el carril equivocado, lo que derivó en una colisión. Las dos personas que viajaban en el otro vehículo, madre e hija, murieron.
El esposo de Sarah Jessica Parker fue acusado de conducir peligrosamente, y aunque pudo haber sido condenado a cinco años de prisión, al final solo tuvo que pagar una multa de 175 dólares.
Celia Lora: en 2010, la hija del rockero mexicano Alex Lora fue declarada culpable de homicidio culposo luego de atropellar y matar a un hombre cuando presuntamente conducía en estado de ebriedad.
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La polémica modelo estuvo 110 días en el centro penal de Santa Martha Acatitla, en México, y finalmente fue condenada a cuatro años de libertad condicional.
Rebecca Gayheart: mientras conducía por el centro de Arizona, EUA, en 2001, la actriz atropelló a Jorge Cruz Jr., de 9 años, cuando éste cruzaba la calle de camino a casa. El pequeño murió al día siguiente.
La protagonista de exitosas cintas de terror como Leyendas urbanas y Scream 2 fue condenada a un año sin conducir un auto y a tres años de cárcel, los cuales pasó en libertad condicional realizando servicios para la comunidad. La artista estadounidense no ha vuelto a protagonizar un éxito luego del lamentable incidente.
Vince Neil: en 1984 el vocalista de la banda Mötley Crüe, en ese entonces de 23 años de edad, y Nicholas Dingley, baterista de la banda Hanoi Rocks, de 24 años, sufrieron un accidente automovilístico cuando Neil conducía en estado de ebriedad. Dingley perdió la vida, y a Vince lo condenaron a pasar 30 días en prisión, 200 horas de servicio comunitario y el pago de 2 millones de dólares.
En 2016, el rockero Dee Snider arremetió contra Vince, y dijo que “no entendía por qué no estaba en la cárcel si es un asesino”. “Este hombre ni siquiera estuvo un tiempo considerable en la cárcel”, expresó Snider a los medios.
Lane Garrison: en 2006, el actor de la exitosa serie Prison Break estampó su vehículo contra un árbol, lo que provocó la muerte de un joven de 17 años y dejó herida a una chica de 15 años que viajaba con él.
Garrison se encontraba bajo la influencia del alcohol y la cocaína al momento del accidente. Fue condenado a 40 meses en prisión y a pagar 280 mil dólares a las familias de las víctimas. En 2009, Lane abandonó la prisión por buen comportamiento e ingresó en una clínica de rehabilitación, para tratar su adicción a las drogas y alcohol.
Amy Locane-Bovenizer: en 2010, la actriz de Melrose Place causó un accidente automovilístico en Montgomery, Nueva Jersey, al chocar el vehículo de un hombre llamado Fred Seeman, hiriéndolo gravemente y matando a su esposa de 60 años.
Las pruebas revelaron que el nivel de alcohol en la sangre de Locane era tres veces superior al límite permitido legalmente en ese momento. En diciembre de 2010, Locane fue acusada por homicidio y asalto agravado. La actriz salió de la cárcel en junio de 2015.
