Tegucigalpa, Honduras
El domingo pasado, 3,232,266 hondureños acudieron a las urnas para elegir a sus autoridades, según los resultados al finalizar el escrutinio en el nivel presidencial, informó ayer el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
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Este número representa un aumento de 932,210 ciudadanos, o sea un 28.8% más que en los comicios de 2009. En estas elecciones estaban convocadas 5,355,112 personas.
En cadena nacional de radio y televisión, los magistrados del TSE, David Matamoros (presidente), Enrique Ortez Sequeira y Saúl Escobar informaron antenoche que concluyó la digitación del nivel presidencial.
El presidente del TSE opinó que las que acaban de pasar “son las votaciones con la menor cantidad de votos nulos y la menor cantidad de votos en blanco, lo cual demuestra que los hondureños fueron a votar con cuidado de no equivocarse y las mesas hicieron un trabajo de primera no anulando votos de manera indebida”.
Según la declaratoria del TSE que informa de los resultados de 2009, publicada en La Gaceta 32105 del 5 de enero de 2010, los sufragios blancos en aquella ocasión fueron 61,440 y los nulos, 92,604. “El ganador de las elecciones en el nivel presidencial es el abogado Juan Orlando Hernández Alvarado, del Partido Nacional de Honduras”.
Contento por el alto nivel de participación electoral, el presidente del TSE dijo que sentía “mucha satisfacción” porque eso era lo que “anhelábamos y pensábamos”.
“Si tomamos en cuenta que en Estados Unidos hay más de un millón de votantes y que haciendo la sumatoria votó el 61%, no podemos dejar de sentirnos satisfechos. Estas han sido las elecciones más votadas, más transparentes y más observadas en la historia de nuestro país”.
Según Matamoros, las del domingo antepasado no solo fueron las elecciones más votadas en la historia de Honduras, “sino que también incluyeron factores importantísimos en los temas de legitimidad”.
El escrutinio en el nivel presidencial tuvo las características de “legitimidad, imparcialidad, transparencia, honestidad, igualdad, rendición de cuentas, buena fe y debido proceso, respetando la libertad electoral”, según el presidente del TSE.
En la cadena de radio, el TSE recordó a los perdedores del proceso electoral que tienen todo el derecho de impugnar, pero con “reclamos oportunos y objetivos”.
Según las estadísticas, el TSE les ha dado la razón a muy pocas impugnaciones, salvo que los reclamantes presenten pruebas contundentes que obliguen a la institución electoral a hacer un conteo voto por voto. Y esto se da solamente cuando la diferencia entre uno y otro contrincante es estrecha. En su resolución, el ente colegiado “da por concluido el escrutinio en el nivel presidencial” y, “en consecuencia, el ganador de las elecciones es el abogado Juan Orlando Hernández Alvarado, del Partido Nacional de Honduras”. El TSE “continuará con el escrutinio de diputados del Congreso Nacional y corporaciones municipales, siguiendo de oficio los procedimientos técnicos y legales debidamente establecidos. Finalizando el escrutinio para los tres niveles y cumplidos los plazos para resolver impugnaciones, el Tribunal Supremo Electoral procederá a emitir la declaratoria final”, dijo Matamoros.
Luego subrayó su satisfacción por el desarrollo del proceso al señalar: “Seguimos adelante, contentos, alegres por el resultado de una votación masiva, de una votación que establece que nunca antes habían acudido tantos hondureños a las urnas, que nunca antes habíamos tenido tanta observación y que nunca antes en la historia de este país tanta comunidad internacional, tantos organismos habían manifestado de manera concluyente que estas elecciones fueron las más transparentes y correctas. El mayor observador de todo el proceso son los 3,232,266 hondureños que acudieron a votar”.
