18/04/2024
07:29 AM

La sequía les quita el trabajo y los obliga a emigrar

Efectos En Ilama, Santa Bárbara, uno de los municipios del corredor seco, bajó la producción de pimienta. Miles de familias están en aprietos económicos.

    ILAMA, SANTA BÁRBARA.

    Los 9,200 habitantes de Ilama, Santa Bárbara, comenzaron este mes a vivir la crisis económica más grave de los últimos 20 años a causa de la vertiginosa caída de la producción de pimienta gorda provocada por la dilatada sequía.

    Las extensas plantaciones de pimienta, que en años pasados solían estar colmadas de trabajadores agrícolas, se encuentran desoladas porque los árboles se volvieron casi estériles.

    En años pasados, de acuerdo con estimaciones de la municipalidad, este producto agrícola le generaba a la economía local alrededor de L80 millones anualmente, ahora, apenas aportará L4 millones.

    La baja producción, la cual se traduce en menos empleos (que siempre son temporales) y escasez de dinero, está obligando a decenas de dueños de plantaciones a sumarse a las corrientes migratorias que salen del Triángulo Norte hacia Estados Unidos.

    El cambio climático está causando estragos, nos está quitando el trabajo

    Jorge Alberto Paz, técnico agrícola municipal

    Para el caso, hace dos meses, previendo la crisis, Elmer Sánchez (42 años), hijo de Arnulfo Sánchez, uno de los grandes productores de la aldea San Juan de la Cruz, tomó una mochila y se marchó con un coyote “para trabajar de albañil o de cualquier otra cosa”.

    Mi papá se acaba de ir con un coyote porque la situación está difícil aquí. Mi papá ya está en San Antonio, Texas. El trabajaba con pimienta que le daba mi abuelo. Ahorita la producción está mala porque no llovió”, dijo Dania Sánchez.

    En años anteriores, entre finales de mayo e inicios de agosto, las plantaciones de pimienta estaban colmadas por cortadores de granos. Actualmente están desoladas.
    Dania, bachiller en humanidades, vive en el casco urbano de Ilama y ayer se encontraba con familiares en San Juan de la Cruz desgranando los minúsculos frutos de las pocas ramas que recientemente cortaron de los árboles. E n la zona rural de este municipio, donde no existe el empleo formal, está radicada el 73% (6,784) de la población (9,204), la diferencia vive en el área urbana, según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE).

    Exportaciones de pimienta
    Los habitantes de Ilama, Santa Bárbara, exportan la pimienta de manera directa a Estados Unidos y Europa.Los granos son empleados para condimentar alimentos.
    85% de la economía de este municipio depende de la pimienta. El café, ganadería y otras actividades tienen una aportación del 15%.
    En las últimas tres décadas, el período comprendido entre finales de mayo e inicios de agosto, ha sido fundamental para esta población porque es cuando la actividad económica se activa por el desarrollo de la cosecha. Esta vez, todas las aldeas están sumidas en un letargo.

    Ayer, con Diana, dentro de un pequeña casa de madera, se encontraba desgranando Aracely Cano (38 años), esposa de Marvin Sánchez (40 años), quien hace dos años también salió con rumbo a Estados Unidos “para mejorar las condiciones de vida”.

    Yo aquí gano L25 por pascón (por llenar un galón de pimienta). Por dos pascones, L50. Mi esposo me manda mensualmente otro poquito, $100, porque también allá no es fácil”, explicó.

    Esta ama de casa, madre de cuatro niñas (de 3, 9, 11 y 13 años), pronostica que la “situación económica se pondrá más crítica porque no hay, ni habrá más trabajo”.

    En años pasados aprovechábamos para ganar dinero desgranando... ahorita vemos que no hay cosecha y eso nos causará un problema a todos”, advirtió.

    Emprender. Agustín Muñoz, alcalde de Ilama, muestra sombreros de junco hechos por artesanos del municipio.
    Los habitantes de Ilama, que aunque en menor escala resultaron afectados por los bajos precios del café a finales de 2018, creyeron que con la cosecha de pimienta se repondrían del golpe, sin embargo, la sequía también les arrebató esta fuente económica.

    Ilama, que ganó notoriedad por la apertura de la cárcel de máxima seguridad El Pozo, es uno de los 146 municipios (de 12 departamentos) que integran el corredor seco de Honduras, la región más afectada por el cambio climático.

    Jorge Alberto Paz, técnico agrícola de la municipalidad, dijo que “el cambio climático está causando desastres en la agricultura, eliminando trabajos y quitando la capacidad económica a estos lugares”.

    Hay pérdidas notables en pimienta, café, ganadería y granos básicos. Los árboles de pimienta se están secando, el café ha sido afectado por los bajos precios y por la roya...”, dijo.

    Paz, ingeniero agrícola, es testigo de los estragos y, a la vez, un afectado directo por ser propietario de cinco manzanas de café que no logró fertilizar porque no captó el suficiente dinero por la venta del grano a precios sumamente bajos.

    Mujeres
    En el área rural viven 1,582,836 mujeres en edad de trabajar. Realizan actividades domésticas que no son remuneradas.
    Medidas. Para atenuar el impacto y evitar una hambruna, la municipalidad entrega a los pequeños productores semilla de maíz, frijol, fertilizantes, urea y otros productos con la intención de garantizar el abastecimiento de los granos básicos en los próximos meses.

    En medio de esta crisis, el alcalde Agustín Muñoz ha llegado a la conclusión de que “Ilama y otros municipios están sufriendo los efectos del cambio climático”.

    Nos está pasando la factura el planeta por el daño que le hemos hecho, lo vamos a pagar con dolor, con hambre y miseria. Las grandes naciones, las más poderosas, destinan grandes presupuestos para comprar armas de guerra, biológicas, químicas, con la pretensión de hacer más dinero y tener más poder. Pero descuidan dos elementos que son esenciales para la vida: el agua y el aire”, dijo.

    Muñoz y otros alcaldes de Santa Bárbara, afectados por el cambio climático, viajarán este día a Perú para participar en Primera Cumbre Internacional de Gestión Pública Ambiental. En este evento, esperan intercambiar experiencias, encontrar apoyo para atenuar los impactos negativos y adquirir conocimientos para vivir en resiliencia.

    En Ilama, la mano de obra no calificada está sufriendo las consecuencias de la baja producción de la pimienta. La mano de obra no calificada son los pobres. La gente está desesperada, nos está pidiendo apoyo, pero no tenemos mucha capacidad. Solo los estamos apoyando con un bono tecnológico”, dijo.

    El alcalde le expresó a Diario LA PRENSA que “lamentablemente por falta de empleo y oportunidades, muchas personas se están yendo de Ilama. Hay personas que venden lo poco que tienen y se están quedando a medio camino porque Estados Unidos, México y Guatemala han endurecido las medidas contra la migración”.

    En Honduras, de una población de más de 9 millones, más de 4 millones viven en zonas rurales, como en San Juan de la Cruz. En estas comunidades, según cifras del INE, hay más de 3 millones en edad de trabajar, pero no todos tienen una fuente de empleo.