18/03/2024
01:53 PM

Niños hondureños con VIH logran llevar una vida normal

A partir del estudio sobre “vigilancia centinela”, en Honduras se ha reducido el porcentaje de infección de madre a hijo.

No todos tuvieron la opción de tomar una decisión, de evitar correr el riesgo con un simple “no” o siendo precavidos. Unos 1,956 menores entre bebés recién nacidos y quinceañeros ya nacieron portando el VIH, y muchos ya no están vivos.

Los niños que vienen al mundo con este virus no conocen otra vida. Crecen entre los juegos y los medicamentos antirretrovirales, entre los sueños inocentes y los chequeos médicos obligatorios. Sin embargo, para ellos lo primero que se pide es igualdad.

Ana María Pineda, coordinadora de programas de Casa Aurora de San Pedro Sula adonde se atiende a niños y adolescentes con VIH, manifestó que un niño, aunque tenga el virus, puede hacer una vida normal.

“Dentro de los programas se ha atendido a niños con VIH, y hay algunos que ahora son jóvenes con más de 28 años, que son parte de la sociedad, que trabajan, estudian y aportan mucho al país.
El VIH no debe ser visto como una sentencia de muerte. Los niños con VIH deben tener todas las oportunidades”, dijo.

En materia de VIH hay más buenas noticias y es que cada vez se previene con más éxito el contagio de madre a hijo.

Conforme al estudio de la Secretaría de Salud sobre “vigilancia centinela” para mujeres embarazadas que tienen VIH, el porcentaje de madres que transmiten el virus a sus hijos ha disminuido de 0.5 a 0.3%.

“El anterior estudio que se había hecho era del año 2006, pero el resultado de nuestra vigilancia centinela reveló que ahora son menos las madres que infectan a sus hijos”, dijo Héctor Galindo, jefe de ITS-VIH-Sida de la Secretaría de Salud.

Prevenir en el embarazo

Desde 1985 hasta la fecha, en Honduras se han registrado 3,360 casos de VIH-sida en personas menores de 20 años de edad, y de esta cifra 1,956 estaban entre recién nacidos y los 15 años.

Juan Ramón Gradelhy, oficial de programas de Onusida, declaró que se deben redoblar esfuerzos para que toda mujer embazada que tenga VIH siga el tratamiento, pues esto reduce mucho las posibilidades de que su hijo sea infectado con el virus.

“Uno de los grandes problemas es que en el país se estima que hay entre 200 y 220 mil mujeres embarazadas, que deberían ir a los servicios de salud, pero de esa cantidad son unas 160 mil las que en realidad van.

Además en algunos de los servicios no se les oferta el programa de prevención de transmisión madre-hijo. En este momento podría decir que es la mitad de las mujeres embarazadas que tienen VIH y requieren el tratamiento para prevenir la transmisión del virus, las que estarían siendo beneficiadas por el programa de prevención”.

Hasta abril, la Secretaría de Salud registraba 50,533 en control prenatal, 60 de ellos resultaron con vih positivo.

Ayuda sicológica

Jeny Linares, parte del grupo fundador del hogar Amor y Vida, adonde viven 31 menores con VIH a quienes se les da estudio, alimentación, medicamentos y vestimenta, manifestó que hace falta ayuda sicológica para los menores. “La fundación no puede costear los servicios de un sicólogo, hemos gestionado en universidades, con sicólogos privados, pero no hemos logrado recibir esa ayuda, que los niños realmente necesitan”.

Una pregunta en común nunca falta después de visitar los hogares adonde viven niños con VIH y es “¿Cuándo van a regresar?”, dicen los pequeños, para quienes una simple visita es un tesoro invaluable.

Para obtener información sobre cómo ayudar o hacer donaciones a las diferentes fundaciones se puede llamar a Amor y Vida al 2559-3776, para apoyo a Casa Aurora 2552-3193
o el 2509-9447 y para hablar a Casa Corazón de la Misericordia al 9982-7193 .

Ver más noticias sobre Honduras