La época de bonanza que vive el café hondureño ha podido ser aprovechada por algunos productores para posicionarse en nichos de mercado que les permitan mantenerse en la preferencia del público. José Arnold Paz es uno de esos productores.
¿Qué tanto se ha cotizado el café hondureño en tiempos recientes?
Los precios actuales nunca los habíamos visto, los precios que están ahorita son de más o menos 2.40 dólares por libra cuando el promedio por lo general ha sido de 85 centavos a 1.50 de dólar.
Estamos hablando de un incremento de casi un dólar por calidad. Honduras tiene un proceso de mejoramiento de la calidad que ya dura 10 años y se está posicionando no como un país de volumen, sino como un país de cafés especiales, como Guatemala, Costa Rica o Colombia.
Hemos avanzado en ese proceso; últimamente hemos tenido visitas de compradores internacionales casi todos los meses. Esperamos ver más productores haciendo este esfuerzo, porque el café hondureño en verdad lo buscan y lo quieren y están dispuestos a pagarlo por lo bueno. Lo malo sigue siendo lo comercial, pero Honduras se está destacando.
La crisis actual ya no es de precios, sino de volumen. No hay café en el mundo y Honduras tiene que aprovecharse de eso porque es de los pocos países que han seguido produciendo la misma cantidad de café en los últimos 10 años.
¿Qué perspectivas se ven para los cafés especiales en 2011?
Esperamos que venga mejor que los años anteriores, los precios están muy estables, no hay café en el mundo, los grandes productores tienen problemas climáticos, de producción, de plagas. Colombia y Brasil se van a recuperar eventualmente pero quedan un par de años en los que tenemos la oportunidad de posicionarnos, aprovechando que no hay café.
El productor tiene que preocuparse, porque en estos años de bonanza tiene que preparar mejor su finca, tecnificarla y asegurar su mercado porque esto es cíclico, y en un par de años estaremos otra vez a 85 centavos de dólar la libra, en crisis de nuevo, pidiendo ayuda, viendo quién nos compra el café, pues ni cosa mejor que tener ya el contrato asegurado.
¿Cuál es la variedad que producen?
En la finca se producen don variedades: la de caturra y la de catuaí, dos variedades venidas de Brasil. Son altas productoras, tienen un buen sabor. 70% de la finca es caturra y 30% es catuaí.
¿Cuáles son las características de estas variedades de café?
Es un porte medio, de alta producción, con sabores achocolatados y de frutas que tiene un intenso sabor a melocotón y un aroma a jazmín con chocolate. Ése es el perfil que se está exportando. El resto de los perfiles comerciales tienen un profundo sabor a chocolate, un aroma muy persistente a nuez.
¿Qué dificultades tuvieron que vencer el año pasado debido a los fenómenos climáticos?
El cambio climático nos está afectando. Yo cultivo a 1,500 metros de altura, y en las zonas altas no había plagas, y ahora tenemos desde zancudos hasta broca, que era una plaga característica de las zonas bajas. Otra cosa que nos está afectando en la larga duración de los inviernos o los veranos, porque o bien nos seca el café en verano, o si llueve en exceso, se nos cae.
El cambio climático es una de nuestras principales preocupaciones. Nosotros tenemos una reserva forestal de 180 manzanas para producir oxígeno en donde hay seis nacimientos de agua y eso nos está protegiendo un poco a manera de un amortiguador.
El problema del país es que muy poca gente está cuidando el bosque y el medio ambiente lo estamos contaminando demasiado. Se nos hace muy difícil también ser los únicos que cumplimos con las regulaciones de manejo de agua cuando nuestros vecinos están drenando las quebradas. Cuando esto sea ley, las metas van a ser altísimas y nos estamos preparando.
La mano de obra siempre es un dolor de cabeza, cada vez está más cara, más escasa, la migración de la gente del campo a la ciudad es indetenible, la delincuencia se está yendo de la ciudad al campo por lo que ahora tenemos que andar armados para proteger nuestros bienes y ésos son algunos de nuestros problemas.
¿Ha participado en competencias internacionales?
Hemos participado en competencias celebradas en Francia. En el 2008 ganamos el tercer lugar en una competencia para la valorización de productos agrícolas en París.
Hemos participado en competencias de cata de café en España, llamada Cecafé 2010, en la que quedamos entre los 15 mejores.
Este año estamos invitados a participar en Italia y en EUA. Aquí en Honduras estuvimos entre los mejores 24 en la Taza de la Excelencia.
¿Cuál considera que ha sido su receta para el éxito?
Disciplina, constancia, tener un esquema de trabajo, buen control de calidad en cada una de las etapa.
Recolección, beneficiado, lavado, secado, almacenamiento, control de calidad, donde se controla la temperatura del grano, la temperatura ambiente, la humedad relativa, cataciones constantes para discriminar las calidades de café, mucho estudio, mucho trabajo y mucha preparación.
Por eso es que es especial y por eso tiene tan alto precio, porque cuesta mucho producirlo.
Yo me tuve que convertir en catador, tuve que hacerme barista, he sido juez, para entender lo que el consumidor quiere y de esa forma conocer el gusto del mercado europeo para poder presentar este producto ya preaprobado.
¿Contemplan abrir otros mercados además del europeo?
El mercado asiático, que está muy pendiente de los cafés del Occidente de Honduras, que se están posicionando fuertes en Estados Unidos, que sigue siendo nuestro principal comprador.
Los cafés olanchanos y de El Paraíso son muy apetecidos por el gusto estadounidense y Japón tiene una preferencia tremenda por los cafés de Lempira, Copán, Ocotepeque, cafés de acideces más altas. Tenemos cafés para todos los gustos.
