Tegucigalpa, Honduras.
El nombramiento de Félix Villanueva como director de la Policía Nacional destrabará la depuración de la institución que ha sido reclamada por la población, sociedad civil y organismos internacionales que miden la corrupción, según fuentes gubernamentales.
Acelerar esa depuración y la falta de resultados en el caso de las fiscales asesinadas el 10 de octubre en San Pedro Sula y la tardanza en esclarecer el asesinato de la Miss Honduras Mundo y su hermana fueron los detonantes que empujaron la remoción de Ramón Sabillón Pineda, que hasta el jueves fungió como director nacional de la Policía, añadieron las fuentes.
El nombramiento de Félix Villanueva como director de la Policía Nacional destrabará la depuración de la institución que ha sido reclamada por la población, sociedad civil y organismos internacionales que miden la corrupción, según fuentes gubernamentales.
Acelerar esa depuración y la falta de resultados en el caso de las fiscales asesinadas el 10 de octubre en San Pedro Sula y la tardanza en esclarecer el asesinato de la Miss Honduras Mundo y su hermana fueron los detonantes que empujaron la remoción de Ramón Sabillón Pineda, que hasta el jueves fungió como director nacional de la Policía, añadieron las fuentes.
Casamata
Hasta anoche, Sabillón Pineda seguía en su oficina en Casamata, pues se niega a dejar el cargo. A las 9:24 pm abandonó el edificio.
El presidente Juan Orlando Hernández se refirió a esta destitución únicamente como un replanteamiento de la estrategia de seguridad asumida por su Gobierno.
“Todos los cambios que se produzcan a partir de esta fecha y también los cambios que se produzcan a principios del próximo año obedecen a una revisión que estamos haciendo, a un replanteamiento que es necesario hacer siempre en función de ajustar los planes que hemos estructurado”, dijo Hernández desde Nueva York, adonde participó en la Alianza Global de Cocinas Limpias.
El ministro de Seguridad, Arturo Corrales, anunció la noche del jueves que por instrucciones del presidente Hernández y como medida estratégica se procedía a separar a Sabillón y en su lugar se nombraba a Félix Villanueva, el que se desempeñaba como subdirector de la Policía Nacional. Pero la destitución provocó una serie de especulaciones y acciones que mostraban el malestar de un grupo de oficiales.
Sabillón Pineda, quien estuvo 11 meses en el puesto, fue asignado a un cargo en la representación diplomática de Honduras en las Naciones Unidas y su remoción “no es muestra de debilidad de la Policía Nacional, sino que, al contrario, demuestra un trabajo para repotenciarla”, dijo Corrales.
“Yo quiero dejar algo claro aquí: la Policía es una institución de orden permanente y vamos a seguir trabajando para repotenciarla con el fin de que su depuración y su transformación continúen para que vuelva a tener esas capacidades y se vuelva a ganar la confianza del pueblo hondureño”, indicó. La seguridad es una política integral y por ende los operadores de justicia tienen que trabajar mancomunadamente, dijo.
“Quien no quiera trabajar coordinadamente, quien quiera seguir separado de este esquema, pues no entiende cuál es la verdadera filosofía y la verdadera efectividad que debe tener la coordinación de todos los operadores de justicia, en ese sentido es parte de todos los movimientos rutinarios”.
Crisis creada
La destitución de Sabillón Pineda provocó movilizaciones de un grupo de oficiales que pretenden evitar que haya más separados en la institución bajo la figura de “retiro voluntario”.
Este grupo está conformado por elementos a los que la Secretaría de Seguridad obligaría a aceptar su jubilación porque hay indicios de que están vinculados con el crimen organizado o han cometido alguna falta grave, según fuentes del Gobierno. Esas fuentes aseguran que Sabillón Pineda se opuso a la separación de 43 policías argumentando que no se estaba siguiendo el procedimiento legal. El despido de los elementos estaba previsto para 23 de septiembre pasado a petición del ministro de Seguridad, Arturo Corrales.
Varias postas de la capital laboraron ayer a medio vapor, pese que en algunos medios se manejó que la paralización era total.
En algunos distritos policiales como el de El Edén y la San Miguel, que dependen de la Unidad Metropolitana de la Policía 1, algunos policías explicaron que “ el mando” les ordenó quedarse en esas postas de forma indefinida y a los elementos que iban de franco se les instruyó para que no salieran.
No obstante, en el distrito policial del barrio Belén, algunos policías dijeron abiertamente que rechazaban la destitución de Sabillón Pineda y que solo la mitad del personal estaba laborando.
El comisionado Sabillón Pineda continuaba hasta ayer en su oficina en Casamata, adonde fue visitado por Marvin Ponce, asesor del presidente de la república.
Félix Villanueva
Por su lado, el comisionado Félix Villanueva ayer en horas de la mañana se reunió con el ministro Corrales en la Academia Nacional de Policía y hasta horas de la noche no había ingresado a su nueva oficina en Casamata.
En el programa Foro Canal 10 trascendió que Sabillón informó que no se pronunciaría sobre su separación porque el mandatario le ordenó no hablar sobre el tema.
