Tegucigalpa. Unos 50 megas de energía se vería obligada a comprar en el mercado regional la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (Enee), para suplir la demanda energética del país en la próxima temporada de verano.
Esa es la previsión que hacen las fuentes al tanto, quines anticipan que dicha potencia sea comprada a Guatemala, El Salvador, y quiza, a Nicaragua.
Según estas mismas fuentes, la alternativa sería suspender el suministro eléctrico durante ciertas horas del día a sectores que estén desvinculados de la producción industrial, los centros hospitalarios y la generación de empleo.
A modo de comparación señalan que durante la temporada seca del año anterior se elevó tanto la demanda eléctrica que ocasionó la suspensión de la transmisión de energía entre las 11:00 am y las 2:00 pm, así como entre las 4:00 pm y las 7:00 pm, que son las horas de mayor consumo debido a que en los hogares se encienden las estufas eléctricas para preparar los alimentos y las personas utilizan sus aparatos eléctricos.
Para compensar, laEnee autorizó el comiezo de las operaciones de las plantas térmicas denominadas Sulzer y Alsthom, que generan unos 40 megavatios y son administradas por la firma Vetasa.
Riesgos
El riesgo que existe, según los técnicos consultados, es que al depender del mercado regional de energía, llegue un momento en el no exista disponibilidad en loa países vecinos.
En tal caso, la Enee podría suspender el suministro eléctrico a un sector del país, para realizar operaciones de mantenimiento. Por otra parte, el presidente de Comisión de Energía del Colegio de Ingenieros Mecánicos, Electricistas y Químicos de Honduras (Cimeqh), Sigfrido Sandoval, expresó que la energía térmica siempre será necearia. Coincide, la gerencia de la Enee en que se requiere recontratar, “en condiciones favorables para el Estado”, las plantas de Elcosa, que genera 80 megavatios y Lufusa I, que aporta 30 megas, para atender la demanda durante las horas de mayor consumo.
El gerente de la Enee, Emil Hawit, expresó que en los últimos dos años se reporta una merma en los regímenes de lluvia, y que esta condición climática no permitió el incremento de los niveles de agua de los embalses de la central hidroeléctrica Francisco Morazán (El Cajón), El Níspero y Río Lindo.
