San Pedro Sula. Tras muchos altibajos en 2013, el sector privado hondureño busca una chispa de optimismo en las oportunidades que ofrece el próximo año y ha dirigido la mirada a tres rubros de gran potencial: minería, turismo y generación de energía.
Otros sectores ofrecen perspectivas igualmente buenas, como la agroindustria, pero el potencial todavía no explotado de los primeros tres anima las expectativas de los empresarios.
“Creo en el turismo, lo podemos potenciar bastante”, asegura Aline Flores, presidenta del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep).
“El año 2013 fue bastante difícil para la economía hondureña”, apunta el empresario Óscar Galeano, quien resalta que las metas de crecimiento económico que se habían planteado se han quedado cortas, pero “rubros como la minería tienen un potencial enorme en el país. No hay país en Centroamérica que tenga los recursos nuestros”, afirma. “Con las inversiones hídricas podemos suplir a toda Centroamérica con energía limpia; tenemos suficientes fuentes y recursos”.
Luis Larach, vicepresidente del Cohep, añade: “Tenemos muchos sectores con potencial de crecimiento: agroindustria, minería, energía, infraestructura. Recordemos que Honduras es un país con muchas necesidades, que está en desarrollo, y los países en desarrollo tienen la ventaja de que podemos desarrollar muy bien cualquier tipo de inversión para el bienestar del pueblo hondureño”.
Esperan ayuda del Gobierno
Para que estas expectativas se conviertan en realidad se necesita acompañamiento y apoyo de las autoridades gubernamentales.
“Esperaríamos que el Gobierno cree un ambiente propicio para el inversionista nacional y el extranjero. Hay que mejorar las condiciones porque las que hemos tenido no han sido muy favorables comparadas con el resto de Centroamérica y eso nos ha hecho perder competitividad”, señala Larach.
El próximo año tomará posesión un nuevo Gobierno, lo cual anima a los empresarios, quienes expresan su confianza en que la nueva administración se convierta en “facilitador” de la inversión para apoyar la llegada de capital fresco y el crecimiento económico.
“Lo importante es que nos dejen trabajar, que es lo que queremos. Cuando hablamos de facilitar es que no nos pongan trabas”, pide Flores.
En esta labor, atacar el problema de la inseguridad ciudadana y jurídica es una prioridad que el sector privado les señala a las nuevas autoridades. “La seguridad personal y jurídica es un fundamento sobre el cual puede apoyar su plan de trabajo el nuevo Gobierno”, remata Galeano.
Muchos proyectos dependen de los flujos de capital procedentes del exterior, otra razón por la que el empresariado necesita que el Gobierno cree las condiciones para atraer su llegada, sin dejar de lado que es necesario que los inversionistas nacionales hagan su parte.
“El inversionista nacional ha sido muy proactivo, emprendedor, y lo exhortamos a que continúe con ese espíritu. Vienen mejores tiempos y hay que aprovecharlos”, arguye Larach.
Las fuentes consultadas coinciden en que, si se logra que el sector público y el privado trabajen en la misma dirección, los resultados pueden ser asombrosos. “Por donde se busque, Honduras tiene oportunidades”, subraya Galeano.
