Mientras no exista en el país un proveedor permanente y confiable de gas natural licuado, GNL, no es conveniente que se piense en cambiar los motores de generación eléctrica a ese combustible. Esa es la conclusión a la que llega el gerente de la Empresa Eléctrica de Puerto Cortés, Elcosa, Salomón Ordóñez.
El profesional es de la opinión que antes que las plantas térmicas promuevan la reconversión de sus motores para que funcionen indistintamente con búnker, diésel o GNL, es indispensable que el país cuente con una planta de almacenamiento permanente y un convenio de abastecimiento de largo plazo que garantice la existencia del producto para evitar inconvenientes.
Ordóñez reveló que ya hay conversaciones entre empresarios del sector térmico y la finlandesa Wartsila para efectuar un estudio que permita identificar la factibilidad técnica y económica de reconvertir sus motores.
La solicitud se formuló luego que el Gobierno anunciara la suscripción de un convenio por 100 megavatios con la empresa norteamericana Westport, quien será el consolidador financiero del proyecto, y la empresa Wartsila será quien venderá y operará las plantas generadoras.
Tras la firma reciente del contrato, la Empresa Nacional de Energía Eléctrica, Enee, ha dicho que pujará por la emisión de un decreto que ponga fin a la generación eléctrica por medio de diésel a más tardar en un año, y con búnker en dos años.
El gerente de Elcosa estima que es muy posible dar este paso tecnológico porque la firma Wartsila le vendió maquinaria a la empresa Luz y Fuerza de San Lorenzo, Lufussa, capaz de generar unos 300 megavatios y a Elcosa, para que genere 80 megavatios.
“Todas estas máquinas son convertibles a gas natural”, expreso el profesional.
Cuánto costará
Para Ordóñez, la clave de ese negocio no consiste en comprar o reconvertir las plantas para generar los 100 megavatios, sino en garantizar el suministro del gas.
El 70% de los cobros efectuados por las térmicas a la Enee están vinculados al precio del combustible.
“Este comportamiento se replicará aun cuando todas las empresas generadoras dejen de generar con búnker y lo hagan con gas natural licuado”, advirtió.
Ordóñez expresó que en el reciente contrato de 100 megavatios se acentuó la discusión en el tema de la compra de las máquinas y no del combustibe que será utilizado para generar la energía.
La Enee aún no ha hecho público cuál será el precio exacto del GNL puesto en Puerto Cortés, su procedencia ni la forma en que será llevado hasta la terminal portuaria.
