Tegucigalpa, Honduras.
Los ingresos suelen mantenerse o aumentan en una pequeña proporción a medida que se acercan las festividades de Navidad y Año Nuevo, pero los gastos, por otro lado, se incrementan; regalos, ropa, viajes y comida son los rubros que suelen darse todos juntos en menos de una semana, lo cual conforma un auténtico desafío para el bolsillo del consumidor promedio.
Muchos compradores se resignan a adquirir productos de baja calidad para abaratar gastos.
Sin embargo, es posible recortar los gastos sin necesidad de sacrificar calidad.
En esa época, las finanzas no se resienten solo por las compras, sino también por los incrementos que sufre el consumo eléctrico.
Las luces de Navidad que adornan la casa y el horno que trabaja horas extras son algunos de los gastos característicos de la temporada.
Si se toma en cuenta algunos consejos, es posible conformar al bolsillo con buenos productos y mantener la factura de la energía dentro de un rango manejable.
La planificación le permitirá ahorrar tiempo, dinero y evitar aumentar en deudas y frustraciones.
