Tegucigalpa, Honduras.
Las pérdidas registradas en la producción agrícola como consecuencia de la sequía podrían empujar el índice inflacionario hasta el 7% para cuando termine el 2014.
Entre quienes prevén este resultado se cuenta el analista Olban Valladares, quien explica que “algunos creen que puede llegar la inflación a un siete por ciento, otros no, creen que si estamos arribita del cinco podemos llegar al seis y medio, que ya representa un incremento muy alto en comparación con los años anteriores”, dijo.
Este indicador, que modifica el comportamiento de los precios, golpea en distinto grado a diferentes sectores poblacionales.
Quienes tienen un empleo o negocio propio buscan adaptarse a los cambios de precio, pero en otros casos, tal adaptación no resulta sencilla.
Los productores campesinos, ubicados hacia el final de la cadena productiva, se ven especialmente afectados por las presiones inflacionarias debido a que no tienen a quién transferir el incremento de los costos.
“No tienen a quién pasárselo y cuando quieren incrementar los valores de sus productos, como el maíz, como el frijol entonces hay una presión enorme de la sociedad organizada”, dijo Valladares.
Según el reporte mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Banco Central de Honduras (BCH), la inflación interanual hasta la mitad del año fue del 6.23%, superior en 0.9% a la reportada el año anterior, cuando fue de 5.3%.
El pago por alimentos y bebidas no alcohólicas, alojamiento, agua y electricidad, transporte, gas y otros combustibles, prendas de vestir, calzado y cuidado personal fueron los bienes y servicios que experimentaron un incremento de precio durante el mes, detalla el informe del BCH.
A los efectos climáticos se suma el de las medidas aprobadas mediante la Ley de Reordenamiento de las Finanzas Públicas, Control de las Exoneraciones y Medidas Antievasión a comienzos del año.
Las pérdidas registradas en la producción agrícola como consecuencia de la sequía podrían empujar el índice inflacionario hasta el 7% para cuando termine el 2014.
Entre quienes prevén este resultado se cuenta el analista Olban Valladares, quien explica que “algunos creen que puede llegar la inflación a un siete por ciento, otros no, creen que si estamos arribita del cinco podemos llegar al seis y medio, que ya representa un incremento muy alto en comparación con los años anteriores”, dijo.
Este indicador, que modifica el comportamiento de los precios, golpea en distinto grado a diferentes sectores poblacionales.
Quienes tienen un empleo o negocio propio buscan adaptarse a los cambios de precio, pero en otros casos, tal adaptación no resulta sencilla.
Los productores campesinos, ubicados hacia el final de la cadena productiva, se ven especialmente afectados por las presiones inflacionarias debido a que no tienen a quién transferir el incremento de los costos.
“No tienen a quién pasárselo y cuando quieren incrementar los valores de sus productos, como el maíz, como el frijol entonces hay una presión enorme de la sociedad organizada”, dijo Valladares.
Según el reporte mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Banco Central de Honduras (BCH), la inflación interanual hasta la mitad del año fue del 6.23%, superior en 0.9% a la reportada el año anterior, cuando fue de 5.3%.
El pago por alimentos y bebidas no alcohólicas, alojamiento, agua y electricidad, transporte, gas y otros combustibles, prendas de vestir, calzado y cuidado personal fueron los bienes y servicios que experimentaron un incremento de precio durante el mes, detalla el informe del BCH.
A los efectos climáticos se suma el de las medidas aprobadas mediante la Ley de Reordenamiento de las Finanzas Públicas, Control de las Exoneraciones y Medidas Antievasión a comienzos del año.
