San Pedro Sula, Honduras.
Autoridades de la Dirección Adjunta de Rentas Aduaneras ( Dara) han reportado un incremento en el flujo comercial entre Honduras y Guatemala a raíz de la apertura de Corinto.
Antes del lanzamiento de la unión aduanera entre los dos países, este puesto fronterizo ubicado en Omoa estaba limitado al cruce de ciertos productos.
A partir de junio del año pasado, Corinto fue habilitado para el movimiento de todo tipo de productos comercializados entre ambos países.
“Eso ha dado mayores facilidades porque ese puesto fronterizo es uno de los más grandes que tenemos en el país”, explicó Raúl Ardón, funcionario de la Dara, en entrevista a medios.
Según el Banco Central de Honduras (BCH), las exportaciones a Guatemala sumaron $236.7 millones al cierre del año pasado, que representó una ligera variación interanual de 0.2%.
En cambio, las importaciones totalizaron $1,011.4 millones, que es superior en $165.8 millones de adquiridos en 2016, es decir un 19.6%.
Con esta cifra, Guatemala es el segundo socio comercial de Honduras (con un 15% de participación), después de Estados Unidos (que suma el 45%); le siguen México y Panamá, en tercero y cuarto lugar, respectivamente.
El año pasado, autoridades de El Salvador anunciaron su intención de adherirse a la unión aduanera y en febrero pasado celebraron rondas de negociación en Tegucigalpa.
La próxima ronda está programada para desarrollarse el otro mes en San Salvador.
Con estos diálogos, que reúnen a los titulares de economía de cada país, esperan que El Poy y El Amatillo sean los puntos fronterizos que entren a la unión aduanera.
En línea con ese proceso, a inicios de semana la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (Sieca) y el Banco Interamericano de Desarrollo firmaron un convenio por $9.8 millones (L230.3 millones) para avanzar en el desarrollo de la Plataforma Digital de Comercio Centroamericana.
La Plataforma Digital es una herramienta transversal de la Estrategia de Facilitación de Comercio y Competitividad con énfasis en la Gestión Coordinada de Fronteras.
El fin es promover que los países implementen una plataforma informática regional para la integración de información.
Autoridades de la Dirección Adjunta de Rentas Aduaneras ( Dara) han reportado un incremento en el flujo comercial entre Honduras y Guatemala a raíz de la apertura de Corinto.
Antes del lanzamiento de la unión aduanera entre los dos países, este puesto fronterizo ubicado en Omoa estaba limitado al cruce de ciertos productos.
A partir de junio del año pasado, Corinto fue habilitado para el movimiento de todo tipo de productos comercializados entre ambos países.
“Eso ha dado mayores facilidades porque ese puesto fronterizo es uno de los más grandes que tenemos en el país”, explicó Raúl Ardón, funcionario de la Dara, en entrevista a medios.
Según el Banco Central de Honduras (BCH), las exportaciones a Guatemala sumaron $236.7 millones al cierre del año pasado, que representó una ligera variación interanual de 0.2%.
En cambio, las importaciones totalizaron $1,011.4 millones, que es superior en $165.8 millones de adquiridos en 2016, es decir un 19.6%.
Con esta cifra, Guatemala es el segundo socio comercial de Honduras (con un 15% de participación), después de Estados Unidos (que suma el 45%); le siguen México y Panamá, en tercero y cuarto lugar, respectivamente.
El año pasado, autoridades de El Salvador anunciaron su intención de adherirse a la unión aduanera y en febrero pasado celebraron rondas de negociación en Tegucigalpa.
La próxima ronda está programada para desarrollarse el otro mes en San Salvador.
Con estos diálogos, que reúnen a los titulares de economía de cada país, esperan que El Poy y El Amatillo sean los puntos fronterizos que entren a la unión aduanera.
En línea con ese proceso, a inicios de semana la Secretaría de Integración Económica Centroamericana (Sieca) y el Banco Interamericano de Desarrollo firmaron un convenio por $9.8 millones (L230.3 millones) para avanzar en el desarrollo de la Plataforma Digital de Comercio Centroamericana.
La Plataforma Digital es una herramienta transversal de la Estrategia de Facilitación de Comercio y Competitividad con énfasis en la Gestión Coordinada de Fronteras.
El fin es promover que los países implementen una plataforma informática regional para la integración de información.
