Estados Unidos
Google acaba de publicar una muy inquietante estadística. De acuerdo con un reporte de la revista Computer Hoy, tener una contraseña fuerte o débil para proteger tu cuenta de Gmail importa poco, pues los “hackers” pueden hallar la manera de obtenerla, o peor aún, hacer que tú mismo se las des. Estos son sus métodos favoritos.
El estudio de Google, elaborado en colaboración con la Universidad de California en Berkeley se encontró con que los métodos más utilizados para hackear a los usuarios están encabezados por al phishing, técnica que engaña a los usuarios haciéndoles creer que entrar en una página web legítima cuando en realidad envías los datos de tu usuario y contraseña directo al hacker.
Este método ha encontrado una valiosa herramienta en aplicaciones populares como WhatsApp, y aprovechan además la inmensa popularidad de dispositivos que usan el mismo sistema operativo, como Android.
Las víctimas más vulnerables son los usuarios con poca experiencia o bien personas mayores, para quienes en más difícil diferenciar una web auténtica de una falsa. El estudio de Google determina que entre el 12 y el 25% de los ataques con la técnica de phishing resulta exitosos.
El segundo lugar se lo lleva el malware, específicamente los del tipo keylogger, programas que pueden llegar sin anunciarse a tu computadora y recopilan toda la información que el usuario introduce a través del teclado.
Aunque no es tan efectivo como el phishing, es la forma que más tiempo ha estado en uso pues prácticamente nació con la internet moderna hace más de 20 años.
Los expertos en seguridad informática recomiendan eliminar los mensajes que llegan por correo electrónico o WhatsApp y nunca hacer clic sobre ellos.
Otra medida de seguridad es nunca teclear información sensible (como la contraseña del la cuenta de banco) cuando se utilicen redes públicas de wifi, debido a que son las más fáciles de hackear.
