Santa Rosa de Copán, Honduras.
Tras seis días de mantenerse obstaculizado el paso por la carretera CA-4, en la comunidad del Ajagual, Cucuyagua, en las últimas horas de ayer se restableció el tránsito vehicular liviano y pesado por la zona, aunque de forma controlada, luego que una falla geológica se activara dañando cerca de un kilómetro de carretera.
El comandante de la 120 Brigada de Infantería, Mario Padilla, miembro del Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager), indicó que luego que se trabajara en la vía colapsada se logró habilitar el paso para un limitado número de vehículos y bajo horarios recomendados por la Comisión Permanente de Contingencias ( Copeco).
Padilla informó que “con los estudios de los geólogos e ingenieros se determinará si la zona podrá ser habitada y si se desviará la carretera hacia otro lugar más conveniente para que pasen vehículos pesados, ya que es una carretera internacional”.
El subcomisionado departamental de Copeco, Omar Lagos, informó que desde ayer se emitió una alerta verde para el municipio de
Cucuyagua, la cual se mantendrá vigente hasta mañana.
La alerta es para que la población de la zona mantenga un monitoreo constante, “no solo en las fallas, sino en los alrededores para seguir monitoreando el desplazamiento de tierra, seguido de la evacuación inmediata de las familias que están dentro de la falla o en las afueras porque puede empeorar”.
El boletín de alerta de la Comisión de Contingencias establece que de acuerdo con pronósticos, en la zona se pueden dar entre 40 y 50 milímetros acumulados de lluvia, que dejarían hasta un 50% de saturación del suelo. La madrugada del domingo, un sismo de magnitud 4.3, cuyo epicentro se localizó en el departamento de Lempira, sacudió el occidente del país, hecho que también podría aumentar la vulnerabilidad de la zona afectada por hundimientos, según Lagos.
Copeco recomendó la evacuación de las familias que habitan la comunidad del
Ajagual, adonde la
falla geológica ha afectado cerca de un kilómetro de la carretera que comunica al país con las aduanas de
El Poy y
Agua Caliente y que además ha dejado 70 familias afectadas.
“Hemos recomendado que el paso debe ser controlado y en horarios de día; exigimos que en la noche no haya paso porque es riesgoso y es posible que haya más problemas. El geólogo recomendó monitoreo constante y evacuación”, reiteró Lagos.
Hasta la tarde de ayer se había logrado desahogar el tráfico vehicular, donde más de 300 rastras y camiones se encontraban parados.
Tras seis días de mantenerse obstaculizado el paso por la carretera CA-4, en la comunidad del Ajagual, Cucuyagua, en las últimas horas de ayer se restableció el tránsito vehicular liviano y pesado por la zona, aunque de forma controlada, luego que una falla geológica se activara dañando cerca de un kilómetro de carretera.
El comandante de la 120 Brigada de Infantería, Mario Padilla, miembro del Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager), indicó que luego que se trabajara en la vía colapsada se logró habilitar el paso para un limitado número de vehículos y bajo horarios recomendados por la Comisión Permanente de Contingencias ( Copeco).
Padilla informó que “con los estudios de los geólogos e ingenieros se determinará si la zona podrá ser habitada y si se desviará la carretera hacia otro lugar más conveniente para que pasen vehículos pesados, ya que es una carretera internacional”.
 Centenares de rastras con mercancías permanece estacionadas.
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La alerta es para que la población de la zona mantenga un monitoreo constante, “no solo en las fallas, sino en los alrededores para seguir monitoreando el desplazamiento de tierra, seguido de la evacuación inmediata de las familias que están dentro de la falla o en las afueras porque puede empeorar”.
El boletín de alerta de la Comisión de Contingencias establece que de acuerdo con pronósticos, en la zona se pueden dar entre 40 y 50 milímetros acumulados de lluvia, que dejarían hasta un 50% de saturación del suelo. La madrugada del domingo, un sismo de magnitud 4.3, cuyo epicentro se localizó en el departamento de Lempira, sacudió el occidente del país, hecho que también podría aumentar la vulnerabilidad de la zona afectada por hundimientos, según Lagos.
 Un vecino del Ajagual observa el daño en las paredes de su casa, 70 familias han sido evacuadas.
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“Hemos recomendado que el paso debe ser controlado y en horarios de día; exigimos que en la noche no haya paso porque es riesgoso y es posible que haya más problemas. El geólogo recomendó monitoreo constante y evacuación”, reiteró Lagos.
Hasta la tarde de ayer se había logrado desahogar el tráfico vehicular, donde más de 300 rastras y camiones se encontraban parados.
 El tramo afectado se localiza a unos 15 kilómetros de la carretera entre Santa Rosa de Copán y Cucuyagua.
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