San Pedro Sula, Honduras.
Las bajas ventas y los altos costos de producción tienen en crisis al sector de la micro, pequeñas y medias empresas (Mipymes), aseguró Esperanza Escobar, presidenta nacional de la Asociación de Pequeños Industriales de Honduras (Ampih).
Escobar explicó que en los primeros dos meses y medio que han transcurrido de este año, muchos negocios han tenido que cerrar sus puertas o paralizar temporalmente sus operaciones ante las escasas ventas.
“No estamos vendiendo nada. Hay una crisis terrible. A diario llegan asociados a la Ampih para decirnos que tuvieron que cerrar sus negocios por las pocas ventas de sus productos. Uno de los sectores más golpeados es el de la costura y construcción”, manifestó Escobar.
Añadió que este año los costos de producción se elevaron entre un 15 y 20% (luz, agua y materia prima).
Le pedimos al Gobierno que nos ayude con financiamientos para poder reactivar nuestros negocios.
Adina Alberto, dueña de un taller de confección en San Pedro Sula, contó que recién tuvo que despedir a dos de las cinco empleadas que trabajan en su microempresa. “Ya no tenía cómo pagarles esos sueldos. La cantidad de pedidos que recibimos se redujo de diez a tres por mes, o sea, una caída de 70%”, lamentó.
Doña Adina dijo que de continuar la escasez de trabajo tendrán que cerrar definitivamente su taller.
“Les pedimos a las autoridades que nos ayuden, porque estamos atravesando una crisis fuerte”, manifestó Alberto.
Las bajas ventas y los altos costos de producción tienen en crisis al sector de la micro, pequeñas y medias empresas (Mipymes), aseguró Esperanza Escobar, presidenta nacional de la Asociación de Pequeños Industriales de Honduras (Ampih).
Escobar explicó que en los primeros dos meses y medio que han transcurrido de este año, muchos negocios han tenido que cerrar sus puertas o paralizar temporalmente sus operaciones ante las escasas ventas.
“No estamos vendiendo nada. Hay una crisis terrible. A diario llegan asociados a la Ampih para decirnos que tuvieron que cerrar sus negocios por las pocas ventas de sus productos. Uno de los sectores más golpeados es el de la costura y construcción”, manifestó Escobar.
Añadió que este año los costos de producción se elevaron entre un 15 y 20% (luz, agua y materia prima).
Le pedimos al Gobierno que nos ayude con financiamientos para poder reactivar nuestros negocios.
Adina Alberto, dueña de un taller de confección en San Pedro Sula, contó que recién tuvo que despedir a dos de las cinco empleadas que trabajan en su microempresa. “Ya no tenía cómo pagarles esos sueldos. La cantidad de pedidos que recibimos se redujo de diez a tres por mes, o sea, una caída de 70%”, lamentó.
Doña Adina dijo que de continuar la escasez de trabajo tendrán que cerrar definitivamente su taller.
“Les pedimos a las autoridades que nos ayuden, porque estamos atravesando una crisis fuerte”, manifestó Alberto.
