Puntual a la cita, Luis Fernando Suárez, técnico de la Bicolor, abrió las puertas de la concentración para charlar en exclusiva con Golazo sobre su estadía en el combinado nacional, se declaró ilusionado con ser campeón en la Copa Oro y confesó cuánto anhela clasificarse al Mundial de Brasil 2014.
-En retrospectiva, ¿cómo considera este tiempo al frente de la Selección?
En términos generales, bien. Se han hecho cosas importantes, como la Copa Oro de hace dos años, cuando se llegó a una semifinal luego de haber estado escasos dos meses acá; el Preolímpico; las Olimpiadas, que tuvieron un enorme valor; y por último una cuadrangular a la que nos clasificamos como primeros. Sabemos que lo más importante es cómo se termina y ojalá termine bien.
-Una vez dijo que estaba enamorado de este equipo. ¿Sigue el romance entre usted y la Bicolor?
Eso es lo que me mantiene aquí. Lo que más veo en este fútbol son la entrega, el deseo de representar bien al país, el sacrificio.
-¿A qué se va a la Copa Oro?
A tener el mayor protagonismo posible y ganar todos los partidos. Vamos a ver adónde nos deja la otra gente, pero creo que no nos pueden quitar la ambición de llegar a lo máximo.
-Cuauhtémoc Blanco dijo que Honduras puede terminar con la hegemonía de EUA y México. ¿Coincide con él?
Honduras está haciendo un esfuerzo grande por tener protagonismo. Creo que lógicamente le ha costado más que a esos dos países, valorando que su poderío es mayor. Incluso con esas adversidades y más en la parte económica estamos dando la batalla.
Al preguntarle por la base que utilizará en la competición en que abrirán frente a Haití el próximo lunes, Suárez no quiso ventilarla por respeto a sus dirigidos, pero nos dio su opinión sobre sus primeros rivales en la Copa Oro.
Haití: “Creo que es un equipo sin responsabilidades y eso lo hace más peligroso. Técnicamente juega bien, está bien dotado, es un conjunto al que, si lo dejas tener la pelota, te va a poner las cosas difíciles. Es alegre, muy veloz, cualquier cuadro que no se le enfrente seriamente va a tener graves problemas”.
El Salvador: “En Centroamérica es de los equipos que más me gusta ver jugar. Hay futbolistas muy buenos que tienen gran dinámica, agresivos. Tienen un cuadro compacto”.
Trinidad y Tobago: “Va a ser una lucha constante. Hay que estar fuerte para enfrentarnos a ellos. Sus características son su potencia, velocidad y buen contragolpe”.
El Mundial: En cuanto a la eliminatoria, Suárez la tiene clara. No hace números, sino que vive el día a día. Eso sí, confía en la clasificación.
-¿Tanto desea que Honduras vaya al Mundial que habló de dar un riñón a cambio de encontrar un goleador de raza?
Lo deseo mucho. No deseo que trivialicen la frase, lo que busco es hacer una comparación de lo importante que es para mí clasificarnos a la Copa del Mundo. Me lo he declarado como un objetivo y también porque es lo que el país necesita. Si hay algo en lo que uno debe pensar cuando quiere conseguir algo grande, es entregarse las 24 horas al día, todo el tiempo. No me he dejado distraer por nada y espero que termine bien porque el esfuerzo ha sido grande, los dolores han sido grandes y el compromiso es fuerte. He tomado en determinado momento hasta decisiones drásticas que de pronto no le pueden gustar a mucha gente, por todo eso sé que me estoy jugando muchas cosas, pero cuando uno apuesta por conseguir algo importante el riesgo debe ser grande.
-Se terminó el “junio maldito”. ¿Qué espera vivir de julio a octubre?
No ha terminado. Hay rezagos. No pude llamar a Juan Pablo Montes. Luis Garrido también tiene problemas, aunque si nos remontamos un año atrás, cuando nos clasificamos a la cuadrangular contra Canadá, fue una época donde estuvimos mejor. A esa altura, el campeonato aquí esta adelantado y los jugadores van a estar en mejor estado físico. No tendremos a Arnold Peralta ante México, pero ahí está Beckeles.
-Después de seis fechas, Honduras está en cuarto lugar. ¿Pensó al principio estar en una mejor posición?
Claro. Soñaba estar de primero, pero soy consciente de que esto esta muy peleado y de que no vamos a quedar en el cuarto puesto. De eso estoy seguro.
-¿Está en riesgo la clasificación directa?
Los riesgos se corren siempre. No vamos a estar 100% seguros, pero tenemos con qué hacerlo. Si hoy terminara la eliminatoria estaríamos clasificados directo o por el repechaje.
-México y Estado Unidos han ganado de visita. ¿Por qué Honduras no lo ha podido lograr?
Eso indica que debemos sumar de visita próximamente. ¿En el Azteca? Esperamos que sea así. De todos modos después tenemos otros tres clásicos. Creo que el México más peligroso es el de ahora. No voy a presentar un equipo que vaya a perder. Nadie es invencible en su sitio. Creo que si hacemos las cosas bien y sabemos afrontar compromisos como estos, que se juegan más con la cabeza que con los pies, podemos tener opciones de ganar.
-¿Con qué sueña en el Azteca?
Sí sueño, pero no es una situación de estar en ese tipo de película a la que solo le faltaría música de fondo. No es estar viviendo realidades, sino hacer las cosas correctamente.
-Muchos lo consideran un buen técnico, pero mencionan que los jugadores no están a la altura de una eliminatoria. ¿Qué piensa?
Me parece que es una gran mentira. Si hay algo que valorar en el equipo, es que saben qué están jugando, que han tenido una buena actitud, que lo han dejado todo dentro de la cancha. Hay veces que nos equivocamos. Eso es cierto. En determinado momento hemos jugado mal. Lo acepto, pero hay actitud, talento. Quizá falta experiencia en jóvenes, no tenemos consolidado un goleador. Está bien, pero en lo demás este grupo merece que la gente esté muy orgullosa de él. Una de las cosas que más me motivan para lograr la clasificación es que no se pierda el legado y no el mío. Muy pronto me voy de acá. Eso lo tengo claro, pero sería muy bueno conseguir la clasificación porque eso es lo que te indica cuál es el camino correcto.
Los resultados te dicen si vas por buen camino. Independientemente de eso, en caso de que no se clasificara a este grupo de jugadores habría que valorar su actitud y seguir trabajando con ellos. Seguramente, si no se clasifica, el técnico se tendría que ir y hablarán un montón de cosas, de fracaso... Tranquilamente me voy.
Finalmente, Suárez se refirió a su trayectoria y nos reveló que conseguir un boleto a Brasil 2014 sería un paso importante para su graduación como técnico.
“La primera vez que me dieron un equipo para un torneo internacional quedé campeón en Francia y después de eso me llamaron al Atlético Nacional de Medellín y se repitió la situación en 1999. Lo peor que me pudo pasar fue eso porque creí que ya lo sabía todo. Después la vida me enseñó de la manera más drástica. Estuve dos o tres años de tumbo en tumbo, fracasando. Eso fue lo más importante para mí. Todas esas enseñanzas le dan a uno la posibilidad de saber que incluso después de estar en un Mundial, Olimpiadas, cinco Copa Libertadores, no se es técnico todavía. Es más, creo que estoy exagerando cuando digo que me estoy graduando de entrenador si me clasifico al Mundial. Estoy dando un paso importante. Eso llega cuando consiga un título en un Mundial, en una Copa Libertadores”, indicó.
