26/03/2024
08:00 PM

Los precios condenan a Puerto Cortés

La terminal de contenedores, ahora operada por OPC, avanzó en eficiencia, pero subió los costos tarifarios.

Puerto Cortés, Honduras.

Las altas tasas que se cobran en la terminal de contenedores de Puerto Cortés y la lentitud extrema en algunos procesos de revisión impiden al puerto más importante de Honduras mejorar su competitividad.

Esto es lo que indican varios clientes, quienes afirman que los precios en la terminal de contenedores hondureña son los más caros del litoral Atlántico de Centroamérica, pues cobra $135 por el total de servicios estándar, o sea $16.03 más que en el puerto Limón y Moín de Costa Rica y $32.99 más que en el puerto Santo Tomás de Castilla, Guatemala.

Esto provoca que la oferta portuaria de otros países centroamericanos sea más atractiva porque ofrecen costos más bajos y procesos de revisión más rápidos.

Las actuales tarifas fueron implementadas por la Operadora Portuaria Centroamericana (OPC), a la cual el Gobierno hondureño le otorgó una concesión de 30 años mediante una alianza público-privada.

Foto: La Prensa

El número de movimientos de contenedores por hora ha mejorado con el nuevo operador privado.
Diario LA PRENSA habló con Óscar Girón, director ejecutivo de la Asociación Hondureña de Compañías y Representantes Navieros (Ahcorena), quien aseguró que los resultados de las inversiones en obras no se han dado de acuerdo a lo esperado, y habló de los precios tarifarios.

“En algunos casos los aumentos de tarifas fueron del 25% y en otros 50%. Este impacto afecta especialmente a importadores y exportadores del país. Son las más altas de la región”, expresó.

Vea: Nueve días puede tardar un contenedor en salir de terminal en Puerto Cortés

Más costos

El director de Ahcorena consideró que ahora hay demasiados costos en la Portuaria. “Si llevan el contenedor del muelle al patio hay que pagar $35; si lo pasan a zona de revisión se pagan otros $30; cuando regresan la carga al patio son otros $30, y el proceso de revisión es muy lento”, indicó.

Según Ahcorena, varias empresas maquiladoras que importaban y exportaban por Puerto Cortés empezaron a salir del país a finales del 2013 (cuando aún no tenía la administración de la terminal de contenedores) y se fueron para Puerto Limón y Moín en Costa Rica, lo cual demuestra cómo ha perdido competitividad Puerto Cortés en los últimos años.

Los precios fijos, costos adicionales, eficiencia y calidad de servicio son algunos de los aspectos que definen la competitividad de cada puerto.

Los navieros lamentan que a pesar de haberse reunido con el ministro de Desarrollo Económico, Alden Rivera, y con el titular de la Comisión para la Promoción de la Alianza Público-Privada (Coalianza), Miguel Ángel Gámez, para abordar el tema de las altas tarifas, no se ha obtenido ninguna solución concreta.

Lentitud extrema

Otra limitante para aumentar la competitividad del puerto es la lentitud en los procesos de revisión, lo cual genera altos costos adicionales a los usuarios.

María Antonia Rivera, directora ejecutiva de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC), reveló que los contenedores que traen al país alimentos deben ser revisados por un inspector de la Secretaría de Salud, pero tan solo hay un supervisor.

“Pueden pasar hasta 10 días para que saquen un contenedor. Esto aumenta los precios del importador y por ello el producto es vendido más caro a los consumidores del país. Es un costo que pagan los hondureños”, dijo.

Los contenedores refrigerados son los que más gastos causan por los atrasos en las revisiones, ya que por cada uno el cliente paga $70 diarios por toma de energía eléctrica; $40 diarios por uso del contenedor, y después de 10 días se pagan $15 extras diarios por la sobreestadía.

“Salud dice que no hay presupuesto para contratar más personal”, indicó Rivera.

Las revisiones por parte de la Dirección Ejecutiva de Ingresos (DEI) también han sido un gran atraso por el poco personal para cumplir con esta tarea. La DEI ya contrató a siete nuevos supervisores que iniciaron labores el jueves 16 de octubre, sin embargo, el personal seguirá siendo insuficiente para las revisiones.

Se refuerza la competencia

En Costa Rica se otorgó una licitación a la empresa holandesa APM terminals, con lo que se pretende construir un megapuerto en Moín.

“Aún no manejamos el puerto, pero queremos hacerlo el mejor de la región”, dijo Rogelio Douglas, gerente de APM.

Por su parte, el puerto Santo Tomás de Castilla de Guatemala está intervenido desde 2012 para mejorar su eficiencia y servicio. Incluso el Gobierno guatemalteco recién inauguró la modernización de una terminal de contenedores en Puerto Barrios (costa Atlántica) con una inversión de $32.2 millones.

En Puerto Cortés habrá una nueva terminal, pero esta solo está completada en un 35%.

Según José Manuel Arriaga Yacamán, exgerente de la Empresa Nacional Portuaria (ENP), se deben reducir costos a clientes y agilizar procesos en la terminal de contenedores de Puerto Cortés.

“El importador o exportador va adonde le dan tarifas más bajas y los procesos son más rápidos”, indicó.

Cuestionó algunos casos de extrema lentitud en la revisión. “Algunos mejor dan por perdida la carga”, manifestó.

Según Arriaga, hay productos en el país que han subido de precio porque el proceso para traerlos ahora es más caro. “La tarifa que costaba unos $100 ahora cuesta $135”, explicó. El exgerente de la ENP manifestó que la conclusión de lo que hay que hacer es simple. “El puerto debe ser rápido y menos costoso”.

El informe “Diagnóstico sobre el desempeño de los puertos” elaborado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) dice: “Puerto Cortés solo puede ampliar su área de influencia si logra ser más eficiente que el puerto guatemalteco Santo Tomás de Castilla y, por lo tanto, generar menos costos para los generadores de carga”.

Foto: La Prensa