San Pedro Sula, Honduras.
El derbi sampedrano produce sensaciones especiales en el delantero del Real España, Bryan Róchez, gran protagonista en aquella recordada paliza 6-1 sobre el Marathón del 22 de marzo de 2014.
Los cuatro goles en ese partido son “bonitos recuerdos” que atesora el espigado ariete de la Máquina. Aunque al escarbar un poco en los registros de los últimos cinco juegos entre ambos nos damos cuenta de que no fue la primera vez que Róchez castigó a los esmeraldas; lo hizo antes en su debut profesional.
“Es otra historia. Un clásico es un clásico y no se puede regalar nada. Hay que estar preparado para todo”, dijo el también seleccionado nacional.
El atacante no se fía del mal momento de los verdolagas y, al contrario, advierte a sus compañeros que no minimicen la capacidad de su rival. “Marathón hace bonitos partidos cada vez que se enfrenta a nosotros y como sea que venga. Estamos decididos a hacer lo nuestro y no minimizarlos”.
Que la cautela de Róchez no los engañe. Sí valora y respeta al rival, aunque tiene claro que “nos vemos ganando los tres puntos. No nos interesa la situación en que está Marathón. Buscamos el triunfo y seguir en el liderato”.
Manifiesta calma: “Si se da un resultado igual, pero no pensamos en lo que pasó con Motagua. Hicimos un buen partido, pero es pasado”.
El jugador de 20 años se atrevió a firmar desde ya una victoria para el choque del domingo: “Siempre pienso en la victoria. Nada de empates ni derrotas”.
Como sucedió frente a Motagua (5-0), Bryan Róchez quiere repetir la celebración con el trencito y regalarle otra alegría a la afición españolista, que espera goles y buen fútbol, “esperamos que esta vez no sea la excepción. Los equipos están persiguiendo el primer lugar y con un tropiezo nuestro nos pueden alcanzar o superar, así que tratamos de hacer lo nuestro”.
El juvenil tiene una gran responsabilidad sobre sus hombros, ya que los catedráticos no contarán con Nicolás Cardozo para el encuentro. Afortunadamente para el club, ya han adoptado el sistema de Javier Delgado.
“Era cuestión de tiempo. Sabíamos que eran los primeros días del profe y estábamos acoplándonos a su sistema de juego. Ya lo hicimos y estamos tratando de hacer un juego más vistoso”.
