Un tipo tranquilo, afable y, por supuesto, uno de los mejores arqueros del país. Así es Donis Escober, quien está a punto de escribir su propia historia bajo los tres palos de los merengues.
Para los que no lo recordaban, el meta olimpista viene de ser tricampeón con su club tras haber disputado los seis juegos de las finales anteriores del Olimpia, cuando el equipo era dirigido por el argentino Danilo Tosello.
En esta final contra Real Sociedad, a Escober le tocó alternar con Noel Valladares, pero el choque decisivo del domingo será suyo y podrá llenarse de gloria si obtienen el soñado tetracampeonato.
“Me siento con deseos de trabajar mucho, de llegar a un buen nivel el domingo y lograr el objetivo”, manifiesta.
Escober, que no estuvo en el primer duelo de la final en que su equipo cayó 1-0 frente al Real Sociedad, calificó de doloroso dicho resultado. “Fue doloroso porque pensábamos sacar un buen resultado, pero todavía falta 90 minutos y aún nada está escrito”.
Sobre si se siente presionado por lo que se está jugando, a pesar de su gran experiencia en este tipo de encuentros, comentó: “La presión siempre existe. Creo que el día que no tenga esa sensación ya no le voy a tener amor al fútbol. Eso es normal en un jugador. Tenemos todos deseos y estamos motivados. Es un partido que todos queremos jugar y lo más importante es hacer un buen trabajo y lograr el objetivo de levantar la copa”.
En cuanto a la pobre actuación del equipo, que se ha tenido que clasificar con lo justo a esta final y ayudado por el reglamento, Donis Escober dice que no encuentra una explicación de lo que está pasando, “pero lo importante es que estamos en la final y a 90 minutos de hacer historia. Dios ha sido bondadoso, nos tiene en un lugar privilegiado y de nosotros depende. Sabemos que no hemos hecho un buen trabajo, pero con lo poco que hemos hecho estamos a las puertas del objetivo. Sabemos que debemos mejorar. Tenemos tiempo para eso y nos queda la revancha el domingo”.
Él no ha dejado pasar ningún detalle. Se ha estado preparando para los penales, si fuera necesario. En esta oportunidad, el golero albo no tendrá la colaboración de uno de los centrales titulares, Johnny Palacios, expulsado en el juego de ida frente a los aceiteros.
Sin embargo, el arquero se siente confiado, pues considera que hay elementos para suplir el buen trabajo que estaba haciendo su compañero en esa posición.
“Johnny es un jugador importante, pero hay otros compañeros con deseos de jugar y van a querer ir a hacer un buen trabajo, o mejor. Lo importante es que tienen todas las ganas. En este caso, Frank Arévalo, después de Johnny, es un jugador que trabaja muy fuerte y sabemos que está bien preparado'.
Carlos Will Mejía tampoco quiere saber del juego anterior contra Real Sociedad y sostuvo: “Ya sabíamos a lo que nos ateníamos, pero ahora hay que olvidarnos de ese juego y prepararnos para los 90 minutos que quedan”.
El volante ofensivo no sabe con certeza si el técnico Juan Carlos Espinoza le seguirá dando la opción de entrar de titular o de recambio, pero en cualquiera de ellas dice que está preparado para el reto.
Al contrario de Escober, Carlos Will dice que tiene una explicación lógica del bajo rendimiento del club en los últimos juegos.
“Creo que descansar en los repechajes y no jugar el último partido contra el Deportes Savio nos pesó un poco, pero este es el último partido, no hay vuelta atrás y uno como jugador tiene que darlo todo”.
