29/03/2024
12:05 AM

Marathón se sacude la mala racha y revive en un clásico frenético

Tras el despido de Primi, el Marathón se repuso y venció al Real España (2-3).

“Los jugadores no querían a Primitivo”, fue la frase de moda en el estadio Morazán y en la redes sociales. Cierto o no, Marathón lució bien y ganó sus primeros tres puntos del torneo y en el clásico sampedrano contra Real España con una noche de ensueño de Mitchel Brown, quien anotó los tres goles de su equipo que ganó 3-2.

Fue el mejor partido de los verdes en el campeonato y coincidió un día después de la salida del entrenador Ramón 'Primitivo' Maradiaga, junto con su asistente Leonel Machado.

No hubo muchos cambios en los titulares y eso despertó la suspicacia de la afición verdolaga que cinco jornadas después por fin celebra el primer triunfo y complica al vecino que cayó con las botas puestas y que a pesar de estar con uno menos todo el segundo tiempo, mostró resistencia, lo que lógicamente dejó un partidazo, el mejor de todo el torneo.

Si bien Marathón jugó muy bien y su triunfo fue justo, el gran protagonista del partido fue Geovanny Mendoza, quien tomó dos decisiones que condicionaron el juego. El árbitro expulsó injustamente a Wilfredo Barahona y le perdonó la roja a Mariano Acevedo, quien le pegó un planchazo en la cara a David Roura. Lo de Barahona fue después de un encontronazo que tuvo con David Meza a los 46 minutos.

En el primer tiempo pareciera que solo hubo un equipo, Marathón, producto de ello fue que tuvo la más clara para abrir el marcador. A los 33 Marco Vega llegó habilitado al área, se la pasó a Mariano Acevedo, quien entró sin portero pero la punteó mal e hizo lo que era más difícil, errar.

FSTIVAL DE GOLES

En el complemento llegaron los cinco goles, cuatro de ellos fueron verdaderas joyitas. A los 56 el primero de ellos, Brown de zurda al ángulo y puso el 1-0, a los 79 Michel Rivera con el centro, Rony Flores la paró de pecho, se la dejó servida a Brown, quien solo la tocó y puso el 2-0.

Cuando los verdolagas seguían celebrando el triunfo Palomo la recibió en el saque de mediocampo por el gol de los verdes, mandó un pase largo a Jairo Puerto que la controló y luego sacó un potente disparo de derecha al ángulo y puso así el 2-1. Fue el mejor tanto de la noche, aunque eso no le ajustó a su equipo.

Estaba todo escrito para que el cierre fuera de infarto, dos minutos más tarde Rony se fue por la derecha, mandó el centro hasta donde estaba el defensor Daniel Tejeda, quien en la intención de botarla cometió un grave error, la pelota se le fue entre las piernas y Brown estaba ahí y doblegó con facilidad a Marcelo Macías para el 3-1.

Faltaba un gol más y este llegó a los 89, centro de Henry Acosta desde la derecha y Palomo en el primer poste cabeceó para vencer a Orio y poner el 3-2 que ya no se movió.