Un nuevo problema se ha desatado para el delantero argentino Lionel Messi, luego de que hace unos días fue condenado a 21 meses de prisión por evadir impuestos, aunque la sentencia no la pagará en la cárcel.
Y es que la semana pasada el cinco veces ganador del Balón de Oro inauguró un restaurante en Barcelona en alianza con su hermano por lo que ahora ya suma quejas entre los vecinos.
El establecimiento se lozaliza en la zona del Eixample de Barcelona y ya recibió una gran cantidad de críticas y la Federación de Asociacones de Vecinos (FAVB) rechazó su instalación.
La principal queja de ellos es que el establecimiento romperá con la armonía que se tiene en la zona por lo que ya reúnen firmas para que el inmueble cierre sus operaciones.
El restaurante cuenta con una licencia de actividad que le permite poner música de fondo ambiental y algunas actuaciones en vivo, con una superficie útil de 905,69 metros cuadrados y un aforo simultáneo para 298 personas, además de una terraza en la calle para unos 48 usuarios adicionales.
El restaurante de Messi y su hermano lleva por nombre Bellavista del Jardín del Norte.
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El restaurante ofrece una diversidad de platos que van desde los 10 hasta los 56 euros (de 163 a 915 pesos). Además de poder disfrutar un ambiente deportivo.
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Según los propios dueños, 'la especialidad de la casa es la milanesa napolitana a caballo', que es la comida preferida de Messi y cuesta 10.50 euros.
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El lugar, que tuvo un precio de 2.5 millones de euros, tiene la intención de brindar un homenaje a Rosario, el lugar natal de Lionel Messi y ahora ya le genera problemas al crack blaugrana.