San Pedro Sula, Honduras.
Quizá sea uno de los capítulos más deslucidos del clásico sampedrano. Quizá Real España y Marathón traicionaron una reputación que tardaron años en ganarse, pero el espectáculo y el resultado no siempre vienen de la mano. La Máquina amarró tres puntos con el triunfo 1-0 sobre el Monstruo y de paso dejó claro quien manda en la ciudad.
Fue un primer tiempo con un juego inconexo, con dos equipos incapaces de guisar ocasiones claras de gol, friccionado. Real España adoleció el peso de Nicolás Cardozo en ataque, donde Allan Lalín e Iván López naufragaron, mérito de la zona baja de los esmeraldas.
Del otro lado de la moneda, el rival también nos quedó a deber. El Monstruo traicionó a la memoria de sus últimos tres juegos y no fue ni la sombra de aquel equipo atrevido que puso contra las cuerdas a Olimpia en el Nacional en la fecha anterior.
Los catedráticos, que habían estudiado a la saciedad al vecino, cumplieron la tarea de desconectar la bujía de los verdes: Mario Berríos. Anularlo es como quitarle el alma al cuerpo de Marathón.
Sin proveedores, Diego Reyes estuvo desamparado en la ofensiva, aunque se las arregló para buscar sorprender la cabaña de Buba López al 20 después de ganarle la posición de Velásquez Colón y rematar ante la salida del arquero españista, que oportunamente cortó el avance.
Tres minutos más tarde, fue Oseguera el que se animó a probar luego de ser habilitado por Lalín. Su disparo fue desviado por Calolo Palacios.
Pero la acción más clara de la Máquina ocurrió al 31, cuando Edder Delgado anticipó la salida de Rafael Zúniga y cabeceó en el primer poste, aunque sin darle la dirección correcta.
La respuesta de los verdolagas tardó, pero llegó. Fue al 36 que Diego Reyes recepcionó un balonazo y estuvo a punto de bañar a Buba, quien en dos tiempos controló la pelota. No hubo más. Los dos se fueron al camerino con el cero la pizarra. Un marcador que firmaron por última en febrero de 2013.
EL COMPLEMENTO
La reanudación del encuentro siguió la misma dinámica: poco fútbol y mucho roce. La lectura del partido fue mejor para Miguel Falero, que se dio cuenta que su equipo necesitaba refrescar el ataque y así lo hizo. Sacó sus dos aces debajo de la manga e hizo ingresar a los uruguayos Cristian Gutiérrez y Bruno Foliados.
Fue la tónica para romper el maleficio del encuentro. La acción del único gol nace al 82 después del error en la salida de Mauricio Sabillón, Foliados lo desarma, conduce y envía el centro desde la izquierda para que Gutiérrez como verdadero cazagoles, se zafara de la marca de 'Calolo' Palacios y apareciera solo para empujar el esférico al fondo de la red.
Fue un descargo para el sudamericano, criticado desde su llegada por supuestas “libras de más”. El tanto de los aurinegros fue una carga muy pesada para Marathón, que a contrarreloj no encontró la forma en la que cambiar la historia.
-FICHA TÉCNICA:
REAL ESPAÑA: Luis López, Odis Borjas, José Colón,Frank Arévalo, César Oseguera, Javier Portillo, Bryan Acosta, Eder Delgado, Jhow Benavídez, Iván López (Bruno Foliados, min.65) y Allan Lalín (Christian Gutiérrez, min.65).
MARATHÓN: Rafael Zúniga, José Carlos Perdomo, Bryan Castro, Carlos Palacios, Samuel Córdova, Jairo Puerto, Wilmer Fuentes, Mario Berríos, Walter Martínez, Diego Reyes y William Zapata.
